La contraseña 123456, una de las más desaconsejadas por los expertos en seguridad cibernética, se mantiene al tope entres las claves más usadas este año.
Según la empresa NordPass, dedicada a la gestión de contraseñas, los usuarios no se toman en serio la seguridad de sus cuentas.
El informe señala que de las 200 contraseñas más usadas en el mundo, más del 90% se pueden descifrar en menos de un segundo con la ayuda de un buen programa.
En el caso de España, los primeros lugares de la contraseña ofrecen números, seguidos de "Barcelona" (que se puede descifrar en un segundo), "Madrid" o "España", (ambas pueden descifrarse en dos minutos), "tequiero" (tres horas) o "real madrid" (un segundo).
Curiosamente, "mierda" aparece en el puesto 37, lo cual siginifica que la usan más de 20 mil personas. Se puede descifrar en dos segundos, porque no se opta por claves alfanuméricas, que combinen letras y números, en una época en que las herramientas para descifrar claves han tenido grandes avances.
¿Cómo se crea una contraseña segura en Internet?
Los expertos sugieren utilizar expresiones con algún significado para el usuario, seguir normas como hacer claves distintas para cada cuenta, cambiarlas a los noventa días y no compartirlas.
Siempre conviene que sean alfanuméricas, y que haya al menos quince caracteres. En caso de compartir la computadora o la tablet, sería ideal crear distintas cuentas de usuario. También se recomienda la verificación en dos pasos.
Además, es importante no crear contraseñas que sean fáciles de desentrañar. Se puede caer en la tentación de colocar datos personales, como la fecha de nacimiento o el nombre de un familiar, y eso las vuelve vulnerables.
Otra recomendación es no utilizar palabras reales, ya que hay softwares que pueden actuar a través de listados de palabras.
Por supuesto, si hay sospechas de que se quiso vulnerar la contraseña, lo primero que hay que hacer es modificarla. No está de más probar con un gestor de contraseñas para recordar las claves, además de generar un password complejo y único para cada cuenta.
Otra opción es armar claves con tres palabras al azar en vez de usar una clave alfanumérica con letras, números y símbolos.
No obstante, nunca se está exento de un ataque cibernético. A veces alcanza con reemplazar la O con un cero o el 1 con un signo de exclamación para que se vulnere la seguridad.