El presidente Alberto Fernández confirmó a este diario que hará un gran acto en Plaza de Mayo para el 10 de diciembre, día de los Derechos Humanos y día en el que se cumplirán 38 años del retorno de la democracia en la Argentina, luego de la dictadura cívico-militar de 1976. En esta oportunidad estará acompañado por la vicepresidenta, Cristina Fernández de Kirchner, y también por el expresidente de Brasil, Luiz Inácio Lula Da Silva, quien arribará a la Argentina un día antes. Está previsto que los tres hablen, pero en la Rosada advierten que no se tratará de un acto partidario, sino de un festival cultural con bandas musicales y dirigido a todo el pueblo.
Antes, el Gobierno entregará en el Museo del Bicentenario los premios Azucena Villaflor a la presidenta de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto, a la Madre de Plaza de Mayo Línea Fundadora, Taty Almeida, al exsenador y defensor de los Derechos Humanos, Hipólito Solari Yrigoyen, y al cineasta Pablo Torello.
Ese día también se cumplen dos años de la asunción de la fórmula Fernández- Fernández. El Presidente explicó que la presencia de Lula tiene que ver con su vínculo personal y que de ninguna manera interfiere en la buena relación institucional que mantiene con el gobierno de Brasil.
La amistad de Alberto con Lula
Fernández tiene una amistad de años con Da Silva. Incluso fue a visitarlo cuando estaba detenido en la Superintendencia de la Policía Federal brasileña de la ciudad de Curitiba, el 4 de julio de 2019. Por esos días Fernández era precandidato a presidente y Lula se encontraba cumpliendo la cuestionada sentencia del juez Sergio Moro, por la que estuvo preso 580 días.
También formó parte del comité internacional para su liberación, en el que estaban, entre otros, Cristina Fernández de Kirchner, el premio nobel de la Paz, Adolfo Pérez Esquivel y el presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa. En diálogo con Página12, el 5 de julio de este año, Lula había resaltado que se encontraba conmovido por el apoyo que recibió de Alberto Fernández y de Cristina Kirchner mientras estuvo detenido y anticipó que "quiero visitar la Argentina este año y agradecerle al pueblo".
El 10 de diciembre en Plaza de Mayo
La posibilidad finalmente se dará el próximo viernes, cuando también se cumplan dos años de la asunción del gobierno del Frente de Todos y de la masiva multitud que se congregó en aquella ocasión en Plaza de Mayo. Esta vez, aclaran, se tratará de "un festival ciudadano".
El último acto importante, y el primero después de la pandemia, que se hizo en la histórica plaza fue el que se llevó adelante para celebrar el Día de la Militancia el 17 de noviembre. Esa concentración significó para el Presidente un respaldo importante de los movimientos sociales, políticos, sindicales, de intendentes y gobernadores.
Según supo este diario, el expresidente brasileño lo llamó a Fernández desde España luego de ver las imágenes del acto por el Día de la Militancia, lo felicitó y le comentó que le gustaría compartir con él algo similar. A partir de ahí surgió la invitación para el día de la Democracia.
Lula, hace unos días, ya de regreso en Brasil, le confirmó a Fernández que estaba listo para viajar y el 9 de diciembre finalmente arribará a la Argentina. El 10 visitará a Fernández en la Rosada, tendrán una reunión a solas en su despacho y luego bajarán al Museo del Bicentenario para entregar los premios Azucena Villaflor.
De Alfonsín a Kirchner
El 10 de diciembre es una fecha de múltiples festejos. En 1983 asumió la presidencia Raúl Alfonsín y por eso es el día de la Democracia. También es el día de los Derechos Humanos y en 2003 el entonces presidente Néstor Kirchner instituyó la entrega del premio anual Azucena Villaflor, quien fuera la fundadora de Madres de Plaza de Mayo y desparecida por la dictadura, con el objetivo reconocer a ciudadanos o entidades destacados por su trayectoria cívica en defensa de los derechos humanos. Paradójicamente, esos premios no se entregaron durante el gobierno de Macri.
Por todos estos motivos en la Rosada advierten que la concentración no será un acto partidario. El ministro de Obras Públicas, Gabriel Katopodis ya había adelantado en declaraciones radiales durante la semana que el acto "sería abierto y amplio porque es lo que corresponde y lo que pretendemos". En esa línea, el reconocimiento en los premios tendrá esa impronta: uno de los que lo recibirá es Solari Yrigoyen, exsenador por la UCR y descendiente del primer presidente radical de la Argentina, y también el cineasta Pablo Torello que realizó el documental "Historia de Aparecidos", cuya investigación permitió el hallazgo de los restos de Villaflor.
La Asociación Madres de Plaza de Mayo, representadas por Hebe de Bonafini, decidió celebrar la fecha el jueves --cuando ellas hacen sus ya tradicionales marchas--. Allí comunidades de pueblos originarios le van a hacer entrega a las Madres de los emblemas de sus pueblos, en agradecimiento por tratarse de referentes por la lucha de los Derechos Humanos. Además, desde su canal de Youtube emitirán una entrevista que Hebe le realizará al expresidente de Ecuador, Rafael Correa, en torno a la situación de Latinoamerica y los DDHH.
Rumbo a Brasil
Fernández, una semana después del acto, viajará a Brasil para participar de la cumbre de jefes de Estado del Mercosur, que tendrá lugar en Brasilia, entre el 16 y 17 de diciembre. La relación con Brasil, durante los últimos meses, viene desarrollándose de manera virtuosa. Incluso el miércoles estuvieron reunidos en Brasilia el secretario de Asuntos Estratégicos, Gustavo Beliz, el vicejefe de gabinete, Jorge Neme y el embajador de la Argentina en Brasil, Daniel Scioli, con Jair Bolsonaro y su ministro de Economía, Paulo Guedes.
Allí los brasileños aseguraron que apoyan al Gobierno argentino en sus negociaciones con el FMI. Luego de eso, los funcionarios participaron de un acto en la Embajada argentina donde se recordó la histórica “Declaración de Foz de Iguazú”, y ambos presidentes, Fernández y Bolsonaro, enviaron un mensaje grabado hablando de la importancia de la unión estratégica entre los dos países. Desde la Rosada aseguran que la relación institucional sigue en perfectas condiciones con el gobierno de Bolsonaro y que la presencia de Lula en el acto es simplemente por el vínculo personal y la amistad que Fernández tiene con él.