La contención estatal para mujeres adolescentes en riesgo social perdió en Rosario dos casas de alojamiento, y agravó el malestar de quienes trabajan en ello, en la órbita de la la Secretaría de Niñez, Adolescencia y Familia, un área sensible que ya este año transitó otras crisis en su cúpula y que derivó en la renuncia de su subsecretaria, en desacuerdo con la gestión.
Los espacios que cerraron a principios de octubre se llaman Chalecito y Casa Puente, dos alojamientos para mujeres y disidencias adolescentes, que funcionaban en convenio entre Niñez de la Provincia y el Programa Andrés Rosario (PAR). Según explicaron trabajadores a Rosario/12, la secretaria Patricia Chialvo decidió interrumpir el acuerdo de co gestión entre Estado y organizaciones civiles para tercerizar las casas de alojamiento destinadas a estas juventudes en riesgo. En el caso de los albergues cerrados (uno en República de la Sexta, y otro en Echesortu), alojaba a adolescentes rescatadas de situaciones de riesgo en su ámbito familiar o comunitario –algunas, desde que eran niñas de corta edad y habían sido alojadas en el extinto Hogar del Huérfano–, y les brindaba un espacio para acompañar su crecimiento en mejores condiciones, cuando no hubiera antes una posibilidad de adopción.
El colectivo de trabajadores lanzó este viernes una campaña destinada a hacer visible lo que consideran "un retroceso en la concepción de los centros residenciales de Niñez, el riesgo de volver a la lógica del patronato", según señaló uno de los múltiples mensajes en redes sociales que se hicieron eco del conflicto. Y emplazan a Chialvo a cumplir su compromiso de reemplazar estos espacios cerrados por la apertura de una casa estatal con la misma lógica de gestión que se venía realizando. "Si la política es tercerizar, entonces vamos a retroceder, con riesgo a volver al modelo del patronato", alertaron.
Ante la decisión "intempestiva y sin contemplaciones" del Ejecutivo, el PAR anunció su decisión de no renovar el convenio de alojamiento, debido a "ciertos cambios en la actual Secretaría de Niñez, Adolescencia y Familia", dirigida por Chialvo. "Vemos con preocupación cómo se están pensando y llevando a cabo las políticas públicas en torno a los alojamientos y programas para adolescentes mujeres sin cuidados parentales dentro de nuestra provincia", agregó el PAR en un comunicado.
La crítica implícita a la gestión provincial en la materia es un desapego a la Ley 12.967, de Promoción y Protección Integral de los Derechos de las Niñas, Niños y Adolescentes. Esta legislación significó, precisamente, la consagración de los niños y niñas como sujetos de derecho y la erradicación del criterio de patronato como política pública para este sector de la sociedad.
"Creímos que esta nueva gestión abriría canales de comunicación para poder empezar a profundizar el trabajo llevado adelante durante todos estos años y poder así potenciar otras formas de “alojar”. Pero no fue así, y lamentamos profundamente que no parece que vaya a serlo. El cierre de ambas casas, forzado por la decisión de la Secretaría de los Derechos de la Niñez, Adolescencia y Familia al no querer continuar co-gestionando, sin una propuesta concreta y superadora que permita continuar pensando y trabajando en alojamientos para las infancias vulneradas es un grave retroceso para la ampliación de derechos", reza el crítico documento emitido por el PAR, un programa a nivel nacional con autoridad en la atención de jóvenes con problemas de adicciones y otras situaciones de riesgo.
"Seguiremos apostando a la construcción conjunta entre el Estado y las Organizaciones Sociales como un modo superador de las lógicas instaladas. Las infancias son el futuro y las políticas públicas tiene que responder a y enmarcarse en sus necesidades y derechos", concluye.
En tanto, el colectivo de operadores y profesionales que se desempeñaba en Casa Puente y Chalecito lanzó una campaña en redes sociales para revertir la caída del convenio con la Asociación Civil PAR y la Provincia. "Ambos dispositivos vienen de casi una década. Su origen se remonta al trabajo de muches actrices de la sociedad civil y del Estado que fueron capaces de llevar adelante el cierre del Hogar del Huérfano, símbolo del Patronato y epicentro de gravísimas vulneraciones de derechos de niñas, niños y adolescentes, y de la convicción de que se podía gestar una política pública que ponga en práctica el compromiso que el Estado Provincial (y Nacional) han asumido con la Convención de los Derechos del Niño", señalaron.
Los trabajadores plantearon su preocupación y exigieron al Gobierno provincial "que cumpla con el compromiso de poner en marcha los recursos necesarios para la apertura de, al menos, una nueva casa de alojamiento en donde se mantengan o mejoren los estándares de calidad alcanzados. Tal compromiso es con lxs trabajadorxs, pero principalmente es con las jovencitas que eran alojadas allí, y con todas las que a futuro, merecen de parte del Estado que se le reconozcan sus Derechos a un centro de vida en donde poder proyectar un futuro mejor".
La Secretaría de Niñez, que depende del Ministerio de Desarrollo Social, tuvo visibilidad periodística en octubre pasado, cuando la subsecretaria Alejandra Fedele renunció ante diferencias de criterio con la directora del área en Rosario, Patricia Virgilio. El disenso, esa vez, estribó en los tiempos que la titular se tomó para denunciar una situación de abuso sexual contra una niña interna en un hogar de tránsito. Por ese caso hay un celador detenido y a la espera de sentencia penal.