Finalmente, el grupo de diputados radicales que desafió abiertamente a la cúpula de Juntos por el Cambio anunció formalmente la ruptura en la alianza opositora. Doce legisladores referenciados con Martín Lousteu y Rodrigo De Loredo conformarán su propio bloque dentro de ese mismo espacio pero fuera de la órbita del cordobés Mario Negri.
El anuncio formal lo hizo Emiliano Yacobitti en sus redes sociales y lo “vendió” como parte de una decisión de carácter “renovador” dentro del radicalismo, por parte de UCR-Evolución, el sector que lidera Losteau.
Según el comunicado, el nuevo bloque será presidido por De Loredo y estará integrado por Yacobitti, Martín Tetáz, las porteñas Carla Carrizo y Dolores Martínez, la cordobesa Gabriela Brouwer de Koning, la santafesina Victoria Tejeda, el neuquino Pablo Cervi, el puntano Alejandro Cacace, la bonaerense Danya Tavela, la entrerriana Marcela Antola y el pampeano Martín Berhongaray.
El anuncio del nuevo bloque radical
El texto publicado por el nuevo bloque que de “renovador” tiene la renovación de la presencia del radicalismo en la alianza de la derecha conservadora abre un nuevo capítulo en la feroz disputa dentro del partido centenario que responde al macrismo.
No solo parte en dos a la bancada de la UCR en la Cámara baja sino que promete réplicas en el Senado, donde Losteau conduce con el viejo operador Enrique “Coti” Nosiglia en bambalinas.
“Más de una decena de diputados de distintas provincias hemos tomado esa decisión porque no estamos de acuerdo con que se repitan las mismas vocerías que vienen expresándose en nombre del partido desde hace décadas”, dice el texto que expresa algunos de los argumentos de la separación.
El quiebre comenzó cuando Yacobitti intentó desplazar a Negri, a quien derrotó en la interna cordobesa de Juntos por el Cambio. Negri sumó apoyos y recogió casi una 30 de los 45 diputados radicales para ratificar su continuidad.
El texto de los supuestos “renovadores” habla de la necesidad de un quiebre necesario tras las últimas elecciones legislativas. Esos comicios, dicen, fueron “un llamado de atención para toda la clase dirigente”, pero particularmente para “las nuevas incorporaciones” integradas por “caras nuevas e ideas nuevas que oxigenen las alternativas”.
Y no conformes con ello, también hablaron de una pretensión por expandir este nuevo espacio: “Hemos buscado persuadir hasta el último instante a los diputados, en defensa del presente y del futuro de nuestro partido”.
Críticas a Mario Negri
Luego, criticaron de soslayo a la conducción del bloque que desde hace años está en manos del cordobés Negri: “Debemos terminar con la distribución de cargos basada en las relaciones personales y las internas partidarias y ser consecuentes con el pensamiento de los ciudadanos. Juntos por el Cambio debe mantenerse unido y creciendo”.
“Se crece designando como autoridades a los que eligió la gente mayoritariamente. Se crece siendo cada vez más federal”, desafiaron y sostuvieron que por ese motivo se eligió al también cordobés De Loredo, como presidente del bloque.
La elección tuvo que ver con su capital político tras haber realizado “una histórica elección en uno de los distritos más grandes e importantes del país como es la provincia de Córdoba”.