El ministro de Economía, Martín Guzmán, fue la voz cantante en el desayuno que ministros del Gobierno compartieron con los directivos del Fondo Soberano Ruso de Inversión Directa, que llegaron al país esta semana para evaluar desembolsos en diferentes áreas. En esa reunión, que tuvo lugar en el Museo del Bicentenario, el ministro amplió el detalle de algunas de las metas que Argentina busca cumplir en el mediano plazo para "crecer y pagar", como gustan decir en la Casa Rosada. En parte, son los datos que incluye el Plan Plurianual, el esquema de convergencias previo que Guzmán viene negociando con el FMI y que llegará al Congreso en los próximos días. 

"En un escenario prudente, hemos proyectado un crecimiento del Producto del 4 por ciento para el año próximo", expresó el funcionario. Según supo este diario, por arrastre y mejoras extras, en el Gobierno suponen que el incremento de la actividad el año próximo será, por lo menos, de 2 puntos por encima de esa marca. Dato en el que coinciden además las consultoras privadas. En esa línea, Guzmán explicó ante los rusos que "estimamos un crecimiento del PBI en 2021 de alrededor del 10 por ciento. A mediados de 2021, organismos internacionales estimaban que a la Argentina le iba a llevar entre 4 y 5 años recuperar la caída del producto de 2020 pero viene dándose en un solo año". 

En ese camino incluyen las exportaciones. Las ventas externas netas, según Guzmán, "vienen creciendo en valor y en volúmenes, es decir, las cantidades exportadas de productos primarios, de manufacturas de origen agropecuario, de manufactura de origen industrial, de combustibles y de energía. Esperamos lo mismo para el 2022". Esta es la razón que explica por qué el Gobierno, además del Presupuesto, quiere debatir de aquí a fin de año leyes clave como la de fomento de exportaciones a la agroindustria. 

Por último, el funcionario habló de que "se está logrando un sendero de ordenamiento de las políticas y cuentas públicas, de una forma alineada con la recuperación económica". Y destacó que "en el 2021 lo que se observa es una reducción del déficit fiscal, consistente con un aumento de la recaudación y baja en el pago de intereses de deuda". Aquí hay dos dudas internas y diferencias: qué resultará de la corrección de subsidios a la energía y cómo el Gobierno planteará crecer con una reducción del gasto.