Las criptomonedas mostraron en las últimas semanas una importante volatilidad. Algunas de las más conocidas como bitcoin llegaron a perder cerca del 25 por ciento de su valor el último mes. Sin embargo los precios siguen en niveles impactantes cuando se hace la comparación contra el inicio de 2020 previo al estallido de la crisis sanitaria internacional. Comprar un bitcoin costaba 5 mil dólares y ahora, alrededor de 50 mil.
Estos valores por ahora mantienen vigente el debate de la descentralización y los criptoactivos. Los analistas más endulzados con estas tecnologías consideran que los sistemas como bitcoin o ethereum -que no tienen un dueño aparte del código fuente- prosperarán hasta convertirse en el mainstream de las finanzas y de la arquitectura financiera global.
Esta discusión no obstante empieza a perder brillo. Las tendencias parecen moverse hacia otro ámbito en el que la idea de la descentralización pura o las redes sin dueño pierden la batalla contra las criptomonedas de las corporaciones y sus plataformas. El anuncio de Whatsapp de la semana pasada es una de las formas más sencillas de observarlo.
Transferencia de dinero
La aplicación de mensajería más popular de occidente incorporó una nueva función para poder enviar y recibir en real time una moneda digital que vale igual que el dólar. Por el momento estará disponible para que lo prueben los usuarios de Estados Unidos. Pero en la hoja de ruta de la firma la apuesta es que llegue a sus 2000 millones de usuarios en el mundo.
El sistema que permite transferir al instante dinero de una cuenta a otra de Whatsapp, tan simple como cuando el usuario manda un mensaje, una foto o se comparte un archivo. La tecnología que opera detrás no es la de FacebookPay sino de otra empresa del mismo grupo llamada Novi. Es una de las divisiones del holding de Mark Zukerberg dedicado a pagos y criptografía.
Este paso de la aplicación de mensajería posiblemente se replique para el resto de plataformas y productos que gestiona Facebook (Meta). Instagram tiene los mismos incentivos que Whatsapp para sumar esta nueva alternativa de pagos. Por el momento la moneda en que se hacen las transacciones es una stablecoin que se asoció con Facebook. Pero probablemente el próximo paso sea modificarla para incluir a Diem, la stablecoin del grupo.
Concentración
Al revisar estas tendencias toman sentido las interpretaciones del economista indio Eswar Prasad en su último libro El futuro del Dinero: Cómo la revolución digital está transformando las monedas y las finanzas. Plantea que si bien las nuevas tecnologías prometen democratizar y descentralizar las finanzas (erosionando las ventajas de las instituciones y de los países más grandes hasta nivelar el campo de juego) podrían terminar teniendo el efecto contrario.
“Existen los efectos de red. Es decir, el fenómeno en que la adopción de una tecnología o un servicio por cada vez más personas aumenta su valor y provoca que incluso más personas lo utilicen creando un ciclo de retroalimentación que lo hace dominante y menos vulnerable a la competencia. Puede pensarse en Facebook o Google”, señala.
A partir de esta lógica considera que -a pesar de permitir barreras de entrada más bajas- el impulso de los cambios de la tecnología podría conducir a una mayor concentración de mercado entre algunos sistemas de pago y proveedores de servicios financieros.
Por ejemplo las instituciones financieras existentes podrían adoptar nuevas tecnologías en su propio beneficio, disuadiendo a los nuevos participantes. “O incluso el dominio de la moneda podría afianzarse con monedas estables emitidas por corporaciones prominentes que rivalizan con las monedas nacionales de economías más pequeñas”, adelanta.