Tras una reunión que mantuvo con los senadores, a la que fue invitada como otros ministros para dar detalles del Presupuesto 2022 en su área, la titular de Desarrollo Social, Verónica Figueroa, confirmó que le había presentado su renuncia al gobernador el 6 de diciembre, un día antes que el Proyecto sea expuesto por el gabinete ante los legisladores, y que por eso no estuvo en dicha presentación.
Sobre los motivos de su renuncia, si bien dijo que eran varios, confirmó que uno de ellos era el del Presupuesto, “que yo entiendo que hay que plantarse y decir que hay que revisarlo claramente”. Sobre un pedido que hizo para su área de $3.626 millones, le asignaron solo $2.090 millones. Esos montos, no contienen las partidas de sueldos que representan $1.661 millones más, las del subsidio al transporte público para ciertos sectores de la sociedad ($1.075 millones), los del Instituto Provincial de Pueblos Indígenas de Salta ($37 millones) y gastos centrales ($244 millones). Lo que hace un total de $5.129 millones para el año entrante.
Figueroa detalló que en esos ítems, el presupuesto creció un 52% con respecto al año en curso, ya que pasó de $1373 millones a los $2.000 millones de este año, que equivale a equiparar el aumento inflacionario anual. Pero lo solicitado era un 164% más para poder abordar todas las situaciones críticas en el marco de pobreza en el que está sumida la provincia y la emergencia que atraviesan los departamentos del norte de Salta.
Cabe aclarar que Desarrollo Social este año recibió el 2,42% del Presupuesto total, cuando el año pasado obtuvo el 2,44%, y figura detrás de otros ministerios como el de Gobierno.
“Como todos los Ministerios, nosotros hicimos un pedido para poder dar respuestas a las necesidades que presenta la cartera que le toca a cada una, y este ministerio tiene que atender a la población más sensible, frágil y prioritaria, a la que queremos incluir para que esa brecha de la que siempre hablamos se vaya achicando”, explicó la ministra a la salida del encuentro con los legisladores. A la vez que indicó que para saber cómo abordar el presupuesto “hay que estudiar y saber mucho”, y que la pandemia profundizó la pobreza en todo el territorio, “en ese sentido nosotros presentamos un Presupuesto para poder abordar la situación”.
Al volver sobre su alejamiento, esgrimió que para ella “se debía discutir aún más y alcanzar un Presupuesto más amplio para poder dar respuestas al cuadro de situación descripto”. Y añadió que deberían revisar el presupuesto teniendo en cuenta que “es un área que requiere recursos para dar respuesta a problemáticas muy complejas no solo de la Capital sino también de toda la provincia”.
Luego desglosó que en rubros prioritarios como economía social, políticas de género, fortalecimiento socio comunitario, primera infancia, políticas sociales, asuntos indígenas y municipios, lo asignado representa un 58% de lo solicitado, por lo que el próximo ministro “deberá abocarse a gestionar nuevas fuentes de financiamiento a nivel nacional”.
Pero puso el foco en ítems como Economía Social, en donde de los más de $22 millones solicitados solo le dieron menos de $ 7 millones, es decir el 31%. O Primera Infancia, que recibirá el 42% de lo requerido ($480 millones contra $1.134 solicitados). “Nosotros atendemos todo el sistema de niñez, a las comunidades originarias y a todo lo que tiene que ver con asistencia alimentaria como comedores y merenderos”, expresó.
También reconoció que dentro del Presupuesto actual, hay secretarías computadas a Desarrollo que ya no pertenecen a ese Ministerio, como Asuntos Indígenas, que pasó a la órbita de Gobernación con Marcelo Córdoba a la cabeza, o Adultos Mayores, y que engrosan el magro índice presupuestario de la cartera. Aunque lo asoció a un error administrativo debido a que son cambios recientes.
Por último, deseó que su cargo sea reemplazado por otra mujer, para no perder el único ministerio que no está ocupado por varones. Por pedido del gobernador, Figueroa estará a cargo de esa cartera hasta el 31 de diciembre.
“Estaba muy cansada”
Horas antes, el ministro de Gobierno Ricardo Villada había desmentido que el alejamiento de Figueroa tenga que ver con un malestar respecto al Presupuesto para el 2022, “obviamente que no, no tiene nada que ver”, sostuvo, y agregó que quienes trabajan en la gestión saben que “a pesar de plantear nuestras expectativas en un Presupuesto, los recursos y la realidad son acotados”. “Es una decisión personal, hizo un esfuerzo tremendo, estaba muy cansada, la entiendo y le agradezco haber dado tanto a la gestión”, manifestó al respecto.
E incluso llegó a esgrimir que la titular de Desarrollo o alguien de su entorno padecía una enfermedad y que a pesar de ello había estado al frente de esa cartera y viajado por todo el territorio provincial durante la peor parte de la pandemia de coronavirus, algo que descartó de plano la ministra al ser consultada, “no estoy cansada ni tengo ninguna enfermedad”, afirmó.
Con respecto a su reemplazante, Villada no quiso arriesgar nombres, “el gobernador se tomará el tiempo necesario”. Pero tampoco aseguró que sea una mujer quien la vaya a reemplazar, al aducir que en ese tipo de cargo “no es una cuestión de cupos la integración del gabinete”. Aunque aclaró que la presencia de mujeres “es clave” para este gobierno, y que se ve reflejado en organismos como la Policía, Defensa al Consumidor, o la misma Corte de Justicia.
La mirada de los senadores
Al salir de la reunión con la hasta fin de mes ministra de Desarrollo Social, el senador Esteban D'Andrea lamentó su partida, y consideró que el encuentro fue muy productivo “por toda la información que brindó, porque sirve de punto de partida para poder exigirle al próximo ministro que se siga un rumbo con lo que está bien y no que se arranque todo de cero”. A la vez que reconoció que el número para esa cartera “hace ruido” en cuanto a que “se pidió un número y se terminó aplicando otro”.
D'Andrea relató que tras analizar los montos pedirán explicaciones al Ejecutivo a la vez que solicitarán algún tipo de reasignación de partidas, “no queremos aprobar solo porcentajes, sino conocer a dónde se aplican y en este caso a dónde iba a aplicarse ese dinero”. “En un país en el que tenemos el 50% de pobreza y con una situación tan complicada, creo que era importante saber cuál era la realidad”, añadió.
“Es un Ministerio muy sensible, porque no se trata solo de entregar bolsones y se deberían revisar algunos número”, acotó el representante por Güemes, Carlos Rosso, quien a su vez consideró que se deberían ver reflejados en el Presupuesto 2022 y no como una promesa de reasignaciones, “porque en cada municipio tiene sus direcciones de Desarrollo Social que dependen directamente de esos recursos, y quien la tenga que reemplazar debe tener claridad de cuál será el Presupuesto con el que cuente”.
Por su parte, durante la ronda de exposiciones, Walter Wayar destacó de la ministra su responsabilidad como funcionaria y su convicción como persona, pidiendo a las áreas técnicas que elaboran el proyecto no olvidar que los números son personas.