El seleccionado argentino Sub 20 de fútbol arrancó mal esta mañana en el arranque del Mundial de la categoría que se desarrolla en Corea del Sur: perdió 3 a 0 en su debut frente a Inglaterra y, además, sufrió la expulsión de su estrella Lautaro Martínez.
El partido se jugó en el Estadio Jeonju. Los goles del conjunto inglés los convirtieron Dominic Calvert-Lewin a los 38 minutos, Adam Armstrong a los 52 y Dominic Solanke, de penal, a los 90.
Martínez, quien ingresó en el segundo tiempo, fue expulsado por pegarle un codazo a Fiyako Tomori a los 77 minutos. El equipo que dirige Claudio Ubeda volverá a jugar el próximo a las 8 de la Argentina ante el combinado local.
El triunfo de los ingleses fue justo, aunque tal vez se impusieron por una diferencia mayor a la merecida. La diferencia de tres tantos en contra que deja a la Argentina en una mala posición no sólo en cuanto a los puntos sino además en el saldo de goles a la hora de la definición de los clasificados para los octavos de final.
Inglaterra basó su victoria en una sólida defensa, con jugadores muy altos y fuertes y una notable efectividad. La Selección argentina tuvo el balón el 59 por ciento de los minutos de juego pero no logró vencer al arquero Feddie Woodman. A la falta de eficacia para definir, se sumó un poco de mala suerte, ya que en en primer tiempo un cabezazo de Santiago Colombatto pegó en el horizontal del arco inglés.
Los ingleses, en cambio, abrieron el marcador en su primar llegada al arco argentino, con un cabezazo de Calvert-Lewin. En el comienzo del segundo tiempo Armstrong puso el 2 a 0 tras un en un preciso contraataque que coronó con un derechazo ante una endeble reacción del arquero de River Franco Petroli.
Ubeda ordenó el ingreso de Martínez, quien logró jugar pese al duro golpe que recibió en la cabeza en un amistoso jugado en Vietnam, en un intento dar vuelta el resultado. Sin embargo, el goleador apenas jugó 17 minutos ya que el árbitro Mohammed Abdulla Hassan, de Emiratos Árabes Unidos, lo expulsó por pegarle un codazo a Tomori.
Sobre el final, cuando Argentina se debatía contra su impotencia, llegó el tercer tanto inglés con un tiro penal ejecutado por Solanke con un derechazo al palo izquierdo de Petroli.