El presidente de Brasil, Michel Temer, buscó mostrarse firme y contraatacó. En un discurso ante la prensa acreditada en el Palacio de Planalto (sede del gobierno federal), desacreditó las grabaciones que lo tienen como protagonista en un nuevo caso de corrupción. El mandatario afirmó que los audios donde se lo escucha avalar el pago de sobornos son "una grabación clandestina manipulada y alterada con objetivos subterráneos" y por ello exigió que se suspendan las investigaciones.
Mientras las movilizaciones se suceden en diferentes ciudades del país donde exigen su inmediata renuncia y el Supremo Tribunal de Brasil habilitó a la Fiscalía General para que los investigue por corrupción, obstrucción a la justicia y asociación ilícita, el mandatario decidió atacar a su denunciante.
El audio que para Temer es "clandestino y manipulado" reproduce una charla que el empresario Joesley Batista mantuvo con el mandatario brasileño. Allí Temer acuerda mantener el pago de soborno para el destituido diputado Eduardo Cunha, quien como presidente de la Cámara baja, llevó adelante el proceso de destitución de la presidenta Dilma Rouseff.
Para Temer lo que hizo Batista es “el crimen perfecto porque sostiene que "engañó a los brasileños y ahora vive en Estados Unidos”. Batista es el dueño de JBS, uno de los frigoríficos más importantes del mundo frigorífico, y quien divulgó la escucha. Para el presidente no hay duda de que ka grabación es “fue fraudulenta y manipulada” porque dice que hay “voces e incoherencias entre los audios y las declaraciones” de Batista.
No contento con ello, Temer indicó que el empresario “anda paseando libre por Nueva York” y pidió que se someta a peritaje el audio, razón por la cual quiere que, en el ínterin, se suspendan las investigaciones. No ahorró epítetos para el empresario de la carne: "Es un conocido fanfarrón, exagerado". Y aseguró que compró mil millones de dólares para desestabilizar el mercado cambiario en Brasil: “Eso ya está siendo investigado por la Comisión de Valores", aseguró.
Las nuevas declaraciones de Temer se conocen 48 horas después de que estallara el escándalo que lo tiene contra las cuerdas, absolutamente debilitado y cuestionado por los grandes emporios mediáticos que sostuvieron y fomentaron la destitución de Dilma y la llegada a la presidencia de Temer.
"Brasil no saldrá de sus carriles. Yo continuaré al frente del gobierno", afirmó el mandatario. El próximo martes la Comisión de Justicia de la Cámara de Diputados iniciará el estudio de una enmienda constitucional que permita anticipar las elecciones directas.