Stefanía Lisa compartió de manera pública una denuncia que radicó en 2019 contra su exprofesor de tenis, Ariel Gallero, por abuso sexual cuando ella tenía 14 años. La joven de hoy 29 años, oriunda de Río Cuarto, también contó que el hombre la había amenazado de muerte en reiteradas oportunidades.
El caso tuvo lugar en el año 2006, cuando con 13 años Lisa se anotó para tomar clases de tenis, pero se vio a obligada a abandonar la práctica por problemas económicos. Fue en ese momento en el que el denunciado se ofreció a enseñarle sin costo. "Mi papá confió en su palabra y accedió porque sabía del amor que yo tenía por el tenis y de las condiciones que yo tenía", relató la joven.
Tras llegar a ese acuerdo con los padres, Gallero comenzó a acosar y abusar de Lisa. "Me llevaba a mi casa en su auto, tomó un desvío y paró en una rotonda. Allí se abalanzó sobre mi asiento y me besó. Me dio asco, yo siempre le dije que me daba asco. Yo sentía que él era un viejo para mí, pero él sólo decía que me amaba y que yo era todo para él”, denunció.
Al compartir su testimonio, la joven indicó que un viaje a Córdoba el acusado abusó sexualmente de ella por primera vez. “Los primeros dos años en que comenzó a abusar de mí, lo reiteró todos los días, de lunes a lunes”, manifestó.
Desde ese momento, los abusos se habrían reiterado por años, seguidos de amenaza para su persona y su entorno: “Me dijo que no tenía que contar nada porque si no iba a prender fuego mi casa con toda mi familia adentro”. Además, el denunciado le decía que él era "la única posibilidad que tenía para jugar al tenis".
"Creo que podría haber tenido una carrera, pero siento que esta persona (Gallero) me truncó la carrera y me la arruinó”, subrayó, al tiempo que agregó que el hombre ejercía un maltrato constante a través de insultos y hasta tirones de pelo cuando no rendía deportivamente.
En diálogo con la prensa, Lisa precisó que en aquel momento "vivía con miedo" y que "todos los días tenía terror de que le hiciera algo o a su familia, porque había amenazado con matarla y hasta un día sacó un arma de la guantera del auto".
“Poder contar mi historia para ayudar a otras víctimas, que a partir de publicar esta causa se animen a denunciar a este y otros agresores también. No quiero que esto le suceda a nadie más, ni a nenas ni a nenes. Por eso es que quiero hacerlo público, para desterrar a monstruos como éste”, concluyó.
A pesar de estar al tanto de las denuncias realizadas en la Justicia hace tiempo, el Club Atenas de Río Cuarto, Córdoba, mantuvo a Gallero en su plantel hasta esta semana, cuando el caso llegó a los medios.
El recorrido judicial
La primera denuncia en contra de Gallero fue radicada a los dos años de los abusos, en la Comisaría Banda Norte. A pesar de que Lisa era una menor de edad, la persona que la atendió le dijo que lo hacía perder el tiempo porque el profesor la iba a amenazar con pegarle un tiro y ella iba a volver con él a la semana.
La segunda denuncia la hizo en febrero de 2019, al saber que el hombre seguía abusando de menores, ante la Subsecretaría de Niñez, Adolescencia y Familia y, posteriormente, en la Unidad Judicial N° 1.
Gallero ha sido imputado por “los delitos de abuso sexual con acceso carnal calificado por la condición de encargado de la educación en grado de tentativa y abuso sexual con acceso carnal reiterado y calificado por la condición de encargado de la educación, todo en concurso real”.
Conocida la denuncia en su contra, sumó otra imputación por amenazas y le dictaron una perimetral. Debido a esa denuncia, Lisa sale de su casa con un botón antipánico que le entregaron en Tribunales.
El 30 de septiembre de este año llegó la imputación y la Justicia citó a Gallero a prestar declaración indagatoria el 2 de noviembre. Si bien concurrió, el hombre se abstuvo de declarar. El lunes de la semana pasada le realizaron la pericia psiquiátrica y el próximo 3 de febrero tendrá que someterse a la pericia psicológica.