Tras una larga investigación, la Policía Federal Argentina (PFA) logró desbaratar a una organización religiosa acusada de trata de personas. Abba Krishna, nombre que recibía la secta, operaba en la provincia de Buenos Aires al menos desde 2017 captando fieles para someterlos a trabajo esclavo.
Las investigaciones comenzaron en 2020 a raíz de una denuncia de identidad reservada que acusó a la organización de esclavizar a los fieles, de alejarlos de su familia y despojarlos de sus bienes.
El primer operativo policial, que consistió en 3 allanamientos en la localidad de 20 de Junio (La Matanza) y 2 en Pontevedra (Merlo), tuvo lugar el pasado 5 de diciembre y terminó con cinco personas detenidas --entre ellas, el líder de la banda-- y la clausura del templo, donde se encontraron a 12 fieles que luego fueron entrevistados por el Programa Nacional de Rescate de Víctimas. También se secuestraron 449.960 pesos, 600 dólares, una tablet y 6 celulares.
Tras la declaración de los testigos, se realizaron otros cuatro allanamientos, también en 20 de junio y Pontevedra, por orden del Juzgado Federal Nº2 de Morón, a cargo de Jorge Rodríguez.
En el operativo, encabezado por la División de Trata de Personas de la Policía Federal, lograron capturar a otro miembro de la organización, un hombre uruguayo de 65 años, y se secuestraron 3 escopetas a repetición, un rifle, 2 escopetas doble caño, una escopeta caño simple, una escopeta semiautomática, 6 pistolas de diferentes calibres, 2 revólveres de diferentes calibres y diversas municiones.
También se hallaron trajes bacteriológicos, que estaban a la venta por 8000 dólares, y medicamentos vencidos.
Según se investiga, las armas y los trajes se vendían con la excusa de que “los fieles tenían que estar armados para defenderse a fuerza de plomo antes del final (del mundo".