La Municipalidad advirtió ayer que evaluarán el funcionamiento del servicio durante las fiestas para promulgar el aumento de la tarifa de taxis y remises, aprobada el pasado viernes por el Concejo. "Lo primero que queremos es que haya taxis en estas fiestas, no estamos pidiendo algo excepcional. Siempre hay inconvenientes con el servicio de taxi, pero ante el incumplimiento de los cronogramas vamos a caducar más chapas, estamos completamente decididos porque necesitamos que el servicio comience a funcionar", dijo la secretaria de Transporte municipal, Eva Jokanovich. "Están jugando a la extorsión, cuando saben que esto no se resuelve de un día para el otro. Ellos saben perfectamente que los titulares de taxis no van a poder cumplir el cronograma, porque no hay choferes. Y la Municipalidad sabe el motivo", afirmó Horacio Yanotti, titular del Sindicato de Peones de Taxis.

Un fuerte contrapunto se dio ayer entre la Municipalidad y los taxistas por la demora en promulgar el aumento de la tarifa aprobado el viernes a la madrugada por el Concejo. "Estamos a la espera de que funcione correctamente el servicio de taxis en estas fiestas. Vamos a medir el 24 y el 25, se han establecido cronogramas especiales de funcionamiento durante las fiestas, asimismo el 31 y el 1º. En la medida en cómo funcione el servicio, el intendente va a evaluar el decreto que promulgue este aumento", dijo ayer Jokanovich a LT8. De acuerdo a ese cronograma, precisó la funcionaria, la mitad de los taxis deber+an estar circulando durante las fiestas.

También planteó que quienes estén habilitados para circular y que tienen un cronograma acordado que respetar, lo hagan. "De lo contrario, se los estarán sancionando , y ante dos sanciones o más podemos ir a la caducidad definitiva de esa chapa, para que los que tengan una licencia de taxis estén en la calle trabajando, es lo que estamos pidiendo", indicó Jokanovich, para luego asegurar que además de las 500 nuevas chapas aprobadas por el Concejo en la última sesión, insistirán en sumar más licencias si el servicio no se regulariza.

"Estamos absolutamente sorprendidos", dijo Yanotti, sobre la advertencia que realizó ayer la secretaria de Transporte de condicionar la suba de la tarifa que aprobó el Concejo en la última sesión de acuerdo al funcionamiento del servicio durante las fiestas. Más allá de la sorpresa, desde el sindicato de Peones de Taxis invitaron a la Municipalidad a replantear cómo tiene que fiscalizar la actividad. 

"El titular de taxi, si no se siente controlado, va a hacer lo que hizo siempre con sus trabajadores. Maltratarlos y registrarlos mal. Ante esa perspectiva, está claro que no se van a conseguir choferes. El municipio debería tomar cartas en el asunto y garantizar que si alguien toma un trabajador para un taxi, que lo haga con lo que dice la ley. Ahí no tendríamos todo este tema, que 'Uber sí o que Uber no', o las apretadas que encima ahora están haciendo de la aplicación mediante estudios de abogados", planteó Yanotti.

"Hay que dejarlo en claro: el taxi es un servicio público, regulado por el Estado. No le demos la posibilidad a aplicaciones extranjeras a cumplir lo que debería hacer el taxi, porque la actividad Uber es incontrolable e ilegal. No es un servicio público, evade absolutamente todo, no sólo la parte laboral", concluyó el taxista.