El intendente Pablo Javkin se refirió ayer al escrache realizado el martes pasado frente a su casa por unos 300 manifestantes antivacunas que rechazan la implementación del Pase Sanitario en la ciudad. Primero se congregaron en Oroño y Córdoba para marchar hacia Oroño y el río y luego directamente al domicilio particular en el que el jefe municipal vive con su esposa y sus dos pequeños hijos. Allí cortaron la calle y comenzaron a cantarle “genocida” y “no al pase”, entre otras expresiones de bronca.
En una entrevista con Pablo Feldman en el programa Radioactividad (Radio UNR), Javkin consideró que “hay gente que está convencida de lo que protesta porque tiene miedo, tiene pánico y ha creído que la vacuna es un veneno y que hay un objetivo de ir a joderle la vida metiéndoselo adentro del cuerpo”.
Además, analizó que “ahora estamos viendo las secuelas de lo que pasó y las secuelas son terribles en lo sanitario, en lo emocional, en lo económico, en el ingreso de quienes trabajan, en el que no tiene laburo y entonces la bronca prima y es un sentimiento natural”.
Ante estas expresiones violentas, evaluó: “Desde la política y mucho más desde sectores progresistas, le tenemos que prestar mucha atención a cómo combatir eso desde una racionalidad política que hoy está devaluada emocionalmente”.