El coeficiente de Gini del tercer trimestre se ubicó en 0,441, siendo cero el valor que implica igualdad absoluta y uno, desigualdad total, informó el Indec. El dato implica una leve mejora frente al mismo trimestre de 2020 y también en relación a 2019. En la misma línea, la brecha de ingresos calculada entre el decil 10 y el decil 1 de ingreso de la población se ubicó en 15, una merma de dos puntos con respecto a 2020.
Los datos oficiales muestran una leve mejora en la distribución del ingreso, dada por la recuperación del empleo, que se refleja en el menor dato de desocupación desde 2017, y el sostenimiento del poder de compra de asignaciones familiares y jubilaciones. Al mismo tiempo, la evaluación se da frente a un período excepcional como la pandemia y de fuerte crisis económica, como sucedió en 2018 y 2019.
Ingresos
La población de referencia para la Encuesta Permanente de Hogares (EPH) del Indec, que consiste en los 31 principales aglomerados urbanos del país, contabilizó en el tercer trimestre ingresos totales por 898.133 millones de pesos, lo cual implica un incremento nominal del 59,8 por ciento en relación con igual trimestre de 2020.
El ingreso promedio per cápita del total de la población alcanzó los 31.035 pesos, aunque la mediana del ingreso per cápita (el número que divide a la población en partes iguales) fue de 22.333 pesos. Entre el 10 por ciento más pobre, el ingreso mediano fue de 5603 pesos, mientras que ese valor en el decil más rico fue de 83 mil pesos.
A su vez, el 10 por ciento más pobre explicó apenas el 1,6 por ciento del ingreso total generado en el tercer trimestre, mientras que el 10 por ciento más pobre recibió el 32,6 por ciento de ese ingreso general. Así, la "brecha de medianas" fue de 15 veces, mientras que en el mismo período de 2020 se ubicó en 17 veces y en 2019, en 18 veces. En 2017 y 2016, esa relación se ubicó en 16 veces.
Si la medición se acota a las personas que efectivamente reciben un ingreso (y no se basa en un promedio del total de la población), el ingreso medio es de 51.594 pesos. Entre el decil 1 y 4, el ingreso promedio personal equivale a 18.127 pesos; el del estrato medio (deciles del 5 al 8) es de 48.546 pesos y el del estrato alto (deciles 9 y 10), de 124.671 pesos. Los perceptores varones tuvieron un ingreso promedio de 60.348 pesos, mientras que el de las mujeres fue de 43.183 pesos.
Empleo
Entre las personas que tienen un empleo (es decir, excluyendo a personas que cobran rentas), un ingreso promedio es de 48.597 pesos y la mediana se ubica en 40 mil pesos. Mientras el promedio de los primeros cuatro deciles de los ocupados es de 17.750 pesos, el número sube a 111 mil pesos entre los deciles 9 y 10.
En el caso de la población asalariada, el ingreso promedio de las personas registradas en el sistema de la seguridad social fue de 62.038 pesos, lo cual implica un incremento interanual del 52,9 por ciento nominal, en línea con la inflación del período.
Hogares
Los ingresos laborales representaron el 76,5 por ciento de los ingresos totales, mientras que los ingresos no laborales alcanzaron el 23,5 por ciento restante. En los deciles de ingreso total familiar más bajos, el peso de los ingresos no laborales fue de 59,5 por ciento, mientras que en el decil de mayores ingresos, sólo explicaron el 15,5 por ciento del presupuesto familiar.
El promedio del país muestra que la cantidad de personas no ocupadas es de 132 por cada 100 ocupadas, mientras que la cantidad de no perceptoras de ingreso fue de 67 por cada 100 perceptoras. Nuevamente, la relación se modifica en función del nivel de ingresos. En el decil 1, de menores ingresos, por ejemplo, hay 276 personas no ocupadas cada 100 ocupadas y 160 no perceptoras cada 100 perceptoras. En el caso del decil 10, los valores correspondientes son iguales a 47 personas no ocupadas cada 100 ocupadas y 20 no perceptoras cada 100 perceptoras.