La Municipalidad de Rosario aplicará sanciones a unos 300 titulares de licencias de taxi que entre la noche del viernes 24 y la madrugada del sábado 25 no salieron a la calle a brindar servicio, tal como establece el acuerdo arribado en las vísperas por las autoridades con las cámaras del sector y el Sindicato de Peones de Taxis.

Es que durante ese período crítico que se buscó garantizar con buena cobertura de transporte (desde las 20 del viernes hasta las 6 del sábado), hubo unos 1.500 coches en servicio, el 80% de los 1800 que debían circular. En ese caso, los asignados al servicio eran las licencias terminadas en número impar.

"Ha sido un buen nivel de servicio, pero entendemos que faltaron unas 300 unidades que no estuvieron, y esta semana aplicaremos las sanciones que corresponden", adelantó Ezequiel Escobar, coordinador del Ente de la Movilidad de Rosario.

Con todo, se observó que la demanda de los pasajeros fue menor a la esperada, en parte porque mucha gente desistió de antemano arriesgarse a no conseguir taxi, y se organizó de otra manera.

El funcionario observó que en muchos casos los incumplimientos tienen varios precedentes, por lo que la penalidad llegaría a la caducidad de la licencia. Para quienes pegaron el faltazo esta Nochebuena sin antecedentes, o con pocos, la sanción será una multa económica.

"Para el 31 esperemos que cumplan con el cronograma estipulado con el sector, para defender el servicio entre todos los actores. Es preciso que los taxis presten servicio con mejor calidad", señaló Escobar.