Desde noviembre que los coreutas, que forman parte del Departamento Vocal y Coral de Salta, insisten para que la provincia garantice la creación de un coro estable. Pues denuncian extrema precarización laboral y la falta de un espacio formativo que permita la profesionalización de los músicos y músicas. 

"Necesitamos que se vuelva formal", expresó a Salta/12, la coreuta Romina Santillán, quien relató que el coro nació en 2013, con el propósito de integrarse formalmente al Instituto de Música y Danza de Salta, pero que con el paso del tiempo no se concretó. Eso se tradujo en precarización laboral, dado que en los primeros años se les asignaba sólo un viático, pero actualmente el trabajo es ad honorem. "Nunca hemos sido remunerados por nuestro trabajo", manifestó la artista. 

Se trata de al menos 35 artistas que cantan en diferentes conciertos convocados por la Secretaría de Cultura de Salta. Sin embargo, en noviembre último decidieron hacer pública la situación después de que le cancelaran un espectáculo a último momento. En ese momento, tenían pactado el concierto Identidades, que presentarían junto al Ballet de la Provincia en el Teatro Provincial. 

A pesar de ello, y como ya habían preparado todo el número, decidieron dar el concierto en la iglesia San Francisco, el lunes 22 de noviembre. "Sin embargo, cuando llegamos a la iglesia nos dijeron que habían hablado para que se suspenda por completo el concierto", relató Santillán. 

Tras esa situación, la música cuestionó que "no se nos dio ningún tipo de explicación". Dicho concierto había sido preparado con cuatro meses de antelación, donde los artistas ensayaban tres días a la semana. Además, lo hacían a partir de las 21, debido que la mayoría trabaja en otras profesiones, como abogados, médicos, músicos, estudiantes. 

Hasta el 2019 ensayaron en el edificio del Instituto, ubicado en la calle Ejército del Norte 50, luego fueron trasladados a otro edificio y después quedaron sin lugar. Desde ese momento, Santillán dijo que empezaron a tener problemas porque "nuestro presupuesto fue prácticamente nulo", situación que es desigual con respecto a otros cuerpos estables como el Ballet de la Provincia. Los últimos ensayos se llevaron adelante en un espacio cedido por la Biblioteca Provincial.

Santillán aseguró que tras la cancelación se sintieron vulnerados y humillados, por lo que decidieron no callarse y reiterar el pedido por un coro estable. La exigencia es "para que los cantantes puedan tener una remuneración estable y también un lugar de formación para todos los salteños que se quieran dedicar a ser músicos". Ante la situación, adelantó que llevarán adelante conciertos de protesta. 

En un comunicado que circuló a fines de noviembre en las redes sociales, el coro sostuvo que desde el cambio de autoridades en la Secretaría de Cultura en 2019, “las condiciones fueron precarizadas y el cuerpo coral ha sido cancelado en reiteradas oportunidades. Es por eso que, por motivación propia, hacemos visible esta situación llamando al diálogo entre las partes, con la intención de que rápida y pasivamente se llegue a una solución”.

Además, aseguraron que contar con un coro estable permite tener un "espacio de gran riqueza ya que difunde las culturas, especialmente la nuestra, y al mismo tiempo promueve la formación de cantantes calificados, muchos de los cuales se desempeñan en el exterior y en importantes teatros del país”, precisó el escrito difundido. 

Según el decreto 2400/13, el Departamento Vocal y Coral, forma parte del Instituto de Música y Danza, pero en la realidad nunca se efectivizó y el presupuesto asignado fue reducido en los últimos años. Incluso, bajo la gestión de Sabrina Sansone, el entonces director Luciano Garay fue nombrado asesor, por lo tanto, el cargo de director quedó vacante. 

Aún así, Garay siguió acompañando ad honorem el trabajo de los cantantes. Y sus dirigidos piden que vuelva a ser nombrado en el cargo. "Somos artistas autoconvocados, porque a pesar de ser cantantes profesionales entendemos que tener un coro estable en Salta, posibilitaría que los chicos que están en Cachi y tienen un talento, puedan explotarlo", manifestó Santillán.

En ese sentido, pidió que se considere la incorporación del cuerpo a la Secretaría de Cultura de Salta para "dignificar el trabajo". "Estamos hartos de recibir este destrato y la suspensión del concierto de noviembre fue la última gota, porque nos quedamos sin tolerancia", expresó, y aseguró que Sansone, tampoco respondió a sus cuestionamientos. 

Además, el grupo de artistas considera que Salta es una provincia de cantantes y por lo tanto, "queremos que un cantor en verdad tenga un futuro en la provincia". Santillán, contó que muchos músicos terminan siendo docentes cuando realizaron toda una formación estricta para el canto. En ese sentido, dijo que el pedido que viene teniendo es para "dignificar nuestro trabajo y que se valore al cantante", expresó. 

Por eso insistieron en que exista un lugar de formación que permita la especialización en el canto, pero que también represente una salida laboral para quien desea seguir esa carrera.