El año nuevo arrancó con una madrugada agitada en las guardias de hospitales, entre personas heridas por pirotecnia, accidentes de tránsito y lesiones causadas por disparos y puntazos de arma blanca.

Entre la noche del viernes y la mañana del sábado se reportaron seis consultas por consecuencias de accidentes causados por el manejo de pirotecnia. De estos pacientes, uno sí sufrió secuelas graves: una fractura expuesta de un dedo por el estallido de un petardo. Este fue socorrido primero en el Hospital Roque Sánez Peña, y debido a la seriedad de la herida, fue derivado al Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (Heca).

Entre los heridos, se contó el caso de un niño que sufrió quemaduras y fue trasladado al Hospital Víctor J. Vilela, donde quedó internado.

Si bien fue notoria la disminución general en el uso de pirotecnia respecto de otros años, la venta clandestina de estos elementos persiste a pesar de estar prohibida desde 2013 por la ordenanza n° 9166 de ese año.

La accidentología en la ciudad sumó también por el lado de los siniestros de tránsito. Hubo en total 20 personas que acudieron a las guardias de distintos hospitales y sanatorios por lesiones de diversa consideración, aunque ninguna revistió mayor gravedad. Seis de estas personas arribaron a bordo de ambulancias del Sies al Heca.

Hubo 16 vehículos remitidos al corralón municipal, y por alcoholemia positiva correspondieron 10 casos. Los inspectores desbarataron dos fiestas callejeras multitudinarias, una en Cerrito y Alsina, y otra en Sarmiento y Salamanca. La secretaria de Convivencia municipal, Carolina Labayrú, destacó que hubo mayor afluencia de público en parques en comparación con la Nochebuena, pero aseguró que no hubo más incidentes que lo apuntado.

La Municipalidad también reportó que hubo 19 personas que acudieron a los efectores de salud pública entre la noche del viernes y la madrugada del sábado por consecuencia de hechos de violencia. En estos se cuentan grescas callejeras, peleas familiares y robos en la vía públia. Seis de estas personas quedaron internadas por heridas con arma de fuego, dos de ellas en estado grave en el Heca. Otras cuatro también quedaron hospitalizadas como consecuencia de heridas con arma blanca.  

Los casos más graves corresponden a un hombre de 34 años, a quien balearon en el pecho en Rodríguez al 4900. Se encontraba anoche en el Heca y con pronóstico reservado. La otra víctima baleada y de gravedad es un muchacho a quien un balazo atravesó entre el pecho y la espalda, en inmediaciones de Villa Banana, en 27 de Febrero y Felipe Moré.

Pese a todo, este fin de semana resulta mejor en comparación con el año nuevo de 2021. Es que hubo menos víctimas de accidentes de tránsito que los 25 que se reportaron hace un año. Lo mismo ocurrió con los heridos por arma de fuego, que este sábado fueron seis personas, y el 1° de enero de 2020 fueron 16. Asimismo, también los que sufrieron lesiones de arma blanca fueron 21 el año pasado, y ahora han sido cuatro solamente. Pero sí hubo un incremento en víctimas de la pirotecnia, que de 3 personas heridas que hubo un año atrás ahora se contaron seis personas atendidas en hospitales por esta causa. 

Destino marcado

La saga de violencia en el último día del 2021 había comenzado de manera trágica, con un ataque a balazos en barrio Tablada, con el saldo de un joven y una niña de 2 años de edad baleados. El lugar del atentado –pasaje Iberia al 100– había sido blanco de una balacera similar dos años atrás, y también con el saldo de una beba herida por uno de los disparos. 

En el caso ocurrido el viernes a la 1, dos personas en moto pasaron frente a un grupo de personas que estaba en la vereda de una casa, en esa cortada que une Chacabuco y Esmeralda al 3200. Un balazo acertó en la pierna de un joven, y otro le dio a una niña de 2 años que estaba en el grupo. Esta vez, como también su precedente, ocurrido en setiembre de 2019, el destinatario de las balas era el mismo: un chico de 16 años que reside en esa cuadra, se lo conoce como Momo y ya tiene prontuario penal abierto.