Los argentinos Kevin Benavides, en motos, y Pablo Copetti, en cuatriciclos, se vieron obligados a abandonar este miércoles por sendas fallas mecánicas, mientras transcurría la 10ma. etapa de la travesía automovilística Rally Dakar, que se desarrolla en territorio de Arabia Saudita.
De este modo, las ilusiones de los pilotos argentinos de ingresar en zona de podio en sus respectivas categorías se escaparon en los primeros tramos de la Etapa 10, que comprende el itinerario entre Wadi Ad Dawasir y Bisha.
El primer infortunio le correspondió al salteño Benavides, cuando en el kilómetro 133, sufrió la explosión del motor de su máquina KTM. “Es muy triste. Venía muy bien, hoy era un buen día para defender el número 1, pero el motor explotó. Muchas gracias a todos los que siempre han estado ahí y tendremos que volver”, comentó Benavides a la TV oficial, mientras aguardaba el helicóptero que lo llevase al vivac.
"Con mucha impotencia tengo que contarles que estoy fuera de carrera. Quería defender ese número uno como sea y las condiciones estaban dadas para poder pelear hasta el final", se lamentó en sus redes sociales el salteño, ganador de la edición pasada.
Unos kilómetros más adelante, una situación idéntica padeció el cordobés nacionalizado estadounidense, que venía segundo en la clasificación general, detrás del francés Alexandre Giroud.
Copetti, quien se había impuesto en la novena etapa y había recortado cinco minutos la diferencia que le llevaba el líder para situarse a poco más de 24m., sintió el ruido a roto del motor de la unidad Yamaha. Al momento del abandono, el nacionalizado norteamericano, de 46 años, marchaba segundo en la etapa, detrás de Giroud, a 25 segundos.