José Carlos Olaya, el automovilista detenido por atropellar y matar a una ciclista en los bosques de Palermo cuando conducía drogado y a alta velocidad, el 2 de enero pasado, pidió la prisión domiciliaria.
Lo hizo al apelar el fallo de la titular del Juzgado Contravencional y de Faltas 12 de la Ciudad de Buenos Aires, Patricia Larroca, quien calificó la muerte de Marcela Bimonte como "homicidio culposo", que contempla una pena mucho menor al de otrros homicidios.
Ahora será la Cámara Penal y Contravencional porteña la que deberá definir si sigue o no detenido.
Mientras tanto sigue en discusión la tipificación del delito: para la fiscal Natalia Prat fue homicidio simple con dolo eventual, que prevé hasta 25 años de cárcel y da por sentado que Olaya era conciente de los riesgos de conducir en ese estado.
La defensa del detenido, por su parte, solicita que el hecho sea calificado como homicidio culposo, que contempla hasta seis años de prisión si fuera agravado, hipótesis con la cual concuerda la jueza del caso.
"No salí a matar a nadie", dijo el imputado al declarar ante la jueza. Agregó que se enteró de la muerte de Bimonte al ser detenido, no antes.
El domingo pasado, una multitudinaria bicicleteada, de la que participaron dos mil personas, reclamó justicia por la muerte de la mujer de 62 años. La movilización unió el Obelisco con el lugar donde fue atropellada Bimonte, quien murió tras ser atropellada junto a otras cinco personas.
En el lugar donde ocurrió la tragedia, familiares y amigos de la víctima colocaron una bicicleta blanca en su honor, junto a una placa con su nombre y la leyenda: "Ciclista asesinada por un automovilista cuando transitaba por la bicisenda".
Durante el acto, la pareja de la víctima, Luis Bruno Ceccato, afirmó: "Cuando no hay palabras, hay que hacer silencio". Además le pidió a los presentes que visualizaran a Marcela como "una mujer feliz, empoderada y libre de sufrimiento".
