El recital recién había terminado. Los temas de Ariana Grande sonaban de fondo. Cientos de personas –la mayoría jóvenes y adolescentes- se levantaban de sus asientos para comenzar a retirarse. Algunos sacaban fotos con sus celulares y grababan videos para compartirlos en las redes sociales. De repente, ¡boom! El ruido de la primera explosión, escuchado desde el interior del Manchester Arenas, dejó helados a los jóvenes que al principio no sabían de qué se trataba. En seguida, los gritos que venían de la entrada confirmaron lo peor. A partir de ahí todo se convirtió en más gritos y corridas. Las imágenes capturadas con los celulares en el momento exacto de la explosión muestran los minutos de terror que se vivieron tras la explosión.
Las cámaras de seguridad de la vía pública registraron cómo se escuchó la explosión en las inmediaciones del estadio.
Por Twitter, la artista dijo estar "quebrada". "Desde el fondo de mi corazón, lo siento mucho. No tengo palabras", escribió la popular cantante tras la conmoción inicial.
