Reino Unido elevó el nivel de alerta terrorista de "grave" a "crítico" y decidió el despliegue de militares para apoyar a la policía. "No podemos ignorar la posibilidad de que un grupo más amplio de individuos esté vinculado con el atentado de Mánchester", explicó la primera ministra británica, Theresa May, tras el ataque de anoche que dejó 22 muertos.
El atentado de Manchester coincide con la campaña para las elecciones legislativas del 8 de junio, que fue cancelada hasta nuevo aviso por todos los candidatos. El nivel de alerta terrorista se había mantenido en “grave” – que significa que un ataque es altamente probable- desde 2014. Ahora, con el estado “crítico”, las autoridades señalan que un atentado es “inminente”.
Hoy la milicia terrorista Estado Islámico (EI) reivindicó el ataque de anoche en Manchester al final de un concierto de la estrella adolescente Ariana Grande, al que asistían muchos niños y jóvenes. Al menos 22 personas murieron y 59 resultaron heridas, muchas de ellas de gravedad.
Los investigadores británicos identificaron al atacante suicida como Salman Abedi, de 22 años, pero no dieron más detalles respecto a su identidad. Según la prensa, nació en Mánchester y es hijo una pareja de refugiados de Libia. "La prioridad sigue siendo saber si actuaba sólo o como parte de una red", dijo el jefe de Policía de Mánchester, Ian Hopkins.
Mientras tanto, varios miles de personas se congregaron hoy en el centro de Manchester para homenajear a las víctimas. "Esto es Manchester", escribió en Twitter el alcalde de la ciudad, Andy Burnham, al comienzo del evento en una colmada plaza Albert. La ministra del Interior, Amber Rudd, y el líder de la oposición laborista Jeremy Corbyn asistieron al evento, en el que el obispo de la ciudad prendió una vela y la multitud realizó un minuto de silencio para recordar a las víctimas.