La Oficina Nacional de Emergencias de Chile (Onemi) emitió una alerta preventiva y pidió evacuar las costas de siete regiones de todo el país, además de la Isla de Pascua y otras zonas, tras la erupción del volcán cerca de la isla de Tonga en el océano Pacífico.
Grupos de personas tratando de alejarse de la costa con sus efectos personales y mascotas se observaron en algunas playas concurridas de estas siete regiones: Arica y Coquimbo (al norte); Ñuble, Biobío y La Araucanía (centro-sur), y Los Ríos y Los Lagos (sur).
Todos los habitantes en estas zonas recibieron un mensaje de alerta en el celular y pudieron oír las alarmas que sonaban en las zonas de playas a través de altavoces: "Alerta de tsunami, concurra a zonas seguras", decían.
Inicialmente, el anuncio solo afectaba a Isla de Pascua, situada en el océano Pacífico, a 3.800 kilómetros del borde continental; al archipiélago Juan Fernández y la isla San Félix, ubicadas a unos 600 kilómetros de Chile, y al borde costero de la Antártida (extremo sur).
Sin embargo, durante la tarde, la alarma se extendió a las siete regiones del territorio continental.
"Tras monitorear todas las costas, hemos determinado que estas zonas estén en este estado de precaución porque podría haber un tsunami de entre 30 centímetros y un metro", alertó Claudio Aldea, subdirector de operaciones de Onemi, en medios locales.
La ONEMI recordó que el Estado de Precaución "es una medida preventiva" y llamó a la población a mantenerse lejos de las playas y paseos costeros.
Según puntualizó la Red Gocientífica de Chile, este mecanismo de alerta se emite cuando existe una probabilidad de que se genere un tsunami menor (entre 30 cm y 1 m). La recomendación para la población de las regiones señaladas, por ende, es alejarse al menos 80 metros de la costa.
El anuncio se produce horas después de una violenta erupción de un volcán submarino cerca de la isla de Tonga, en el Pacífico Sur, que provocó un feroz tsunami que encendió las alarmas en otras partes del mundo.
En Tonga, el embate de las olas golpeó unos quince minutos las viviendas y edificios asentados en la primera línea de la costa norte de Tongatapu, según los vídeos publicados en las redes sociales por testigos.
Las autoridades pidieron a toda la población asentada en las costas acudir a zonas altas para guarecerse del fuerte oleaje y usar mascarillas ante la lluvia de ceniza.