El gobierno nacional anunció que entró en vigencia la reducción de los derechos de exportación para las economías regionales. Respondiendo a una normativa emitida en diciembre, se redujeron a cero los gravámenes que alcanzaban, en algunos productos, guarismos de hasta un 12 por ciento. El objetivo es estimular a estos sectores, para que generen divisas adicionales por 1145 millones de dólares en los próximos cinco años.
La medida fue publicada en el Boletín Oficial a mediados de diciembre, indicando que empezaba a regir a partir del primero de enero. El Ministerio de Agricultura resaltó que el mayor impacto será en maíz pisingallo, lana, semillas de sorgo, cebada, maní y aceite de maní, que desde ahora no tributarán más derechos de exportación. También impacta en productos de molinería, preparaciones de hortalizas y semillas para siembra de distintas especies hortícolas.
"Se trata de productos con gran potencial de generación de puestos de trabajo que implican un bajo o nulo impacto en los precios internos. El objetivo es fortalecer la producción, la creación de empleo, el arraigo y las exportaciones", explicaron desde Agricultura.
Tampoco pagarán retenciones “los productos que revistan la condición de ecológicos, biológicos u orgánicos, debidamente certificados y autorizados por el organismo competente, en los términos de la Ley N° 25.127. En tanto, las exportaciones con certificación orgánica de grano y harina de trigo, maíz, poroto, harina, pellets y aceite de soja y margarinas, tendrán un rebaja de 5 puntos”.
Esta rebaja impositiva forma parte del proceso de negociaciones que en 2021 mantuvieron la Casa Rosada y el Consejo Agroindustrial Argentino (CAA) para impulsar a las economías regionales. En junio del año pasado se eliminaron las retenciones a otras producciones como miel, huevo, pimienta y otras especies aromáticas, semillas de papa, girasol, arroz y aceites.
Nueva estructura arancelaria
Para el maíz pisingallo, se redujo la alícuota al 0 por ciento. En el caso de grasas y aceites, se redujo al 0 por ciento para productos regionales como aceites de tung, ricino, uva, así como de cera de abejas. Algunos productos de la molinería tienen ahora alícuotas del 0 por ciento. Se incluyó en esta categoría harinas de avena, centeno, garbanzo, lenteja, porotos, granos perlados o triturados de avena, copos de papa, fécula de papa y mandioca, entre otros, que estaban tributando al 4,5 por ciento.
Por otro lado, se bajó a 0 por ciento los derechos de exportación para preparaciones de pepinos, hongos, arvejas, maíz dulce, espárragos, alcauciles, palmitos, y jaleas, mermeladas y purés de membrillo, mango, peras, manzanas, entre otros.
Descendió a 0 por ciento los derechos de exportación de las semillas para siembra de distintas especies hortícolas, para siembra de lino, nabo o colza, algodón, ricino, mostaza, cártamo, cáñamo, amapola, pino, eucalipto, melón, alfalfa, trébol blanco y rojo, festuca, lolium, lotus, agropiro. También de plantas aromáticas o medicinales como la manzanilla. En el caso de plantas vivas y productos de la floricultura como bulbos, esquejes, árboles y arbustos de especies ornamentales y de la fruticultura, entre otros, se estableció una baja en los derechos de exportación al 0 por ciento.A su vez, se redujo a 0 por ciento los derechos de exportación de algunas mercaderías que revistan la condición de ecológicos, biológicos u orgánicos.
Se fijó el esquema arancelario de lanas sucias y cardadas, así como de pelos de guanaco, vicuña, cabra, entre otros productos, entre 3 por ciento y 5 por ciento, respectivamente. También se contempló la reducción de los derechos de exportación de todo el complejo del maní que de acuerdo a su proceso pueden ver una reducción en las alícuotas, incluso hasta llegar al 0 por ciento.