Microsoft hizo una oferta para quedarse con la firma Activision Blizzard por 68.700 millones de dólares, lo que le permitirá pasar a ser dueño de franquicias como Call of Duty, Diablo y World of Warcraft. Según informaron los directivos, lo que hay por el momento es una "intención de compra" que estará sujeta a la aprobación de los organismos pertinentes y que recién podrá hacerse efectiva cuando cierre el año fiscal 2023.
Esta adquisición, evaluó la compañía que dirige Satya Nadella, "acelerará el crecimiento del negocio de juegos de Microsoft en móviles, PC, consolas y en la nube, y proporcionará bloques de construcción para el metaverso".
Cuando se complete la transacción, que consistirá en el pago de 95 dólares por acción, Microsoft será "la tercera empresa de videojuegos más grande del mundo por ingresos", después de Sony y Tencent.
Esta compra le permitirá a Microsoft quedarse con las marcas de Activision, Blizzard, Digital Legends y King, es decir, 'Warcraft' 'Diablo', 'Overwatch', 'Call of Duty' y 'Candy Crush', entre otras. ¿Serán los próximos juegos de Activision Blizzard exclusivos de PC y Xbox? Por el momento, ninguna empresa se pronunció al respecto.
Según apuntan desde la compañía de Nadella, la compra de Activision Blizzard permitirá a los jugadores acceder a los títulos de la empresa desde cualquier lado a través de la nube. Esto permitiría que los juegos de Activision Blizzard lleguen a Game Pass, como ya sucedió con los de Bethesda.
"Tras el cierre, Microsoft contará con 30 estudios internos de desarrollo de juegos, junto con capacidades adicionales de publicación y producción de esports", afirmó la empresa.
Bobby Kotick seguirá como CEO
El CEO de Activision Blizzard, Bobby Kotick, seguirá en su puesto, una decisión que posiblemente será mal recibida debido a que el ejecutivo se encuentra en el centro de una polémica por acusaciones de acoso y maltrato en la compañía.
Hace unos meses, el máximo responsable de Microsoft Gaming, Phil Spencer, había manifestado sentirse "perturbado y profundamente preocupado por los horribles eventos y acciones" que estaban teniendo lugar Activision. También dijo, en ese momento, que Xbox estaba "evaluando todos los aspectos de nuestra relación con Activision Blizzard y haciendo ajustes proactivos en curso". Por eso, para muchas personas, la adquisición fue una gran sorpresa.
"Bobby Kotick seguirá siendo el CEO de Activision Blizzard, y él y su equipo mantendrán su enfoque en impulsar los esfuerzos para fortalecer aún más la cultura de la compañía y acelerar el crecimiento del negocio. Una vez cerrado el acuerdo, el negocio de Activision Blizzard dependerá de Phil Spencer, CEO de Microsoft Gaming", confirmó Microsoft luego de informar sobre la futura adquisición.
"Como empresa, Microsoft está comprometida con nuestro camino hacia la inclusión en todos los aspectos del juego, tanto entre los empleados como entre los jugadores. Valoramos profundamente las culturas individuales de los estudios. También creemos que el éxito creativo y la autonomía van de la mano con el tratamiento de cada persona con dignidad y respeto. Este es el compromiso de todos los equipos y de todos los directivos. Estamos deseando extender nuestra cultura de inclusión proactiva a los grandes equipos de Activision Blizzard", expresó Spencer.