Melani Juárez tenía 21 años y hacía unos meses que vivía en la pensión de barrio Martin donde ayer su cuerpo sin vida fue encontrado con una decena de puñaladas. Su familia intentaba contactarla desde el domingo, y finalmente dio aviso a personal policial que entró a la habitación de la casona de 9 de Julio 549, donde el televisor estaba a todo volumen. Las sospechas de a familia apuntan a un hombre que vivía en el mismo lugar y pagó un mes por otra pieza, pero se retiró el domingo pasado, cuando recién se cumplían 15 días. Fiscalía espera dar con imágenes de las cámaras de seguridad de la zona y busca el celular de la joven que no estaba en el lugar del hecho.

 

Melani acostumbraba usar casi a diario las redes sociales, con posteos y publicaciones. Su familia se alarmó cuando el domingo no daba señales de vida, ni la veían conectada en WhatsApp. Ante la falta de respuestas, se contactaron con la policía. Cuando llegó el personal policial se encontró con que la habitación tenía la puerta cerrada con llave y las ventanas no estaban trabadas.

Un dato que llamó la atención de la familia de la joven, tras conocer el inesperado desenlace, es que un hombre que también vivía allí pagó un mes en la pensión, pero estuvo dos semanas y el domingo pasado dejó el lugar. "Vino una amiga a buscar a mi hermana y le dijo que ya se había ido, pero mi hermana ya estaba en la pieza supuestamente asesinada o no sabemos si fue antes, pero desvió (la información) y dijo que se había ido con otro chico en una chata", relató Agustín. Otro dato que obtuvieron es que su hermana había discutido con la dueña de la pensión por el precio de la habitación: le cobraban 15 mil pesos por mes, según agregó el hermano en Canal 3.

El joven relató que Melani estuvo trabajando en un local de venta de accesorios para celulares y que actualmente hacía cadetería a través de la aplicación Rappi, ya que tenía la mochila de esa empresa en su bicicleta. Sin embargo, toda la familia coincidió con que su pasión era bailar. Era profesora de salsa, reggaeton y bachata. Su hermano contó que incluso llegó a participar en algunos videos musicales.

Su madre y su padre estaban desgarrados. "Fue un baldazo de agua fría", dijo el hombre. Patricia no dejaba de llorar y dijo que "hacía como cuatro días que ella no ponía fotos", lo que llamó su atención. 

Desde el Ministerio Público de la Acusación indicaron que "se comisionó al gabinete criminalístico para el relevamiento de la escena del hecho, pericias fotográficas, toma de testimonios a personas que ocupaban la pensión, familiares de la víctima y vecinos de la zona que pudiesen aportar datos. Hay medidas en curso y trabajo en conjunto con la AIC, tendientes a dilucidar la mecánica del hecho y dar con el o los agresores".