Una denuncia de posible contaminación en las aguas del río Salado realizada por el Movimiento Campesino de Santiago del Estero (MOCASE) originó que una comisió del Ministerio de Ambiente de la Nación realizara una inspección en a la altura de la pequeña localidad de San José del Boquerón, en Santiago del Estero.
El MOCASE se alertó sobre la posibilidad de que el río estuviera contaminado por la mortandad de peces, el color verde de sus aguas y el fuerte olor que despiden. Sin embargo, los especialistas descartaron que el río esté contaminado, y atribuyeron la muerte de la fauna ictícola a la ola de calor que genera falta de oxigenación. Estas conclusiones sorprendieron al movimiento campesino, que aún tiene dudas, y que en su denuncia habían apuntado contra la posible contaminación de la Empresa Austin Powder, que tiene su planta en la localidad de El Tunal, en Salta.
"El cuerpo de inspectores determinó que las altas temperaturas fueron las que causaron anoxia (falta de oxígeno) en la fauna ictícola. También se tomaron muestras de agua en distintos puntos del río Salado, como en el azud derivador en Cruz Bajada y el canal de enlace", informó el Ministerio de Ambiente.
Pese a lo señalado por la cartera de Ambiente, a los miembros del MOCASE no les convence la conclusión a la que arribaron y siguen sospechando que puede haber contaminación. "Tenemos dudas porque uno vive el día a día aquí y siempre Santiago del Estero tiene temperaturas altas. Hubo sequías peores que ésta y nunca pasó lo que hoy", dijo a Salta/12 el presidente del Movimiento Campesino, Guido Corvalán. Además, destacó que el agua empezó a cambiar de color tornándose oscura verdosa y con mucho olor: "La gente empezó a llamar porque veía que no se podía tomar", contó.
También el comunicador popular e integrante del MOCASE Roger Almaraz dijo a Salta/12 que en años anteriores han tenido temperaturas mayores a los 50 grados y no morían los peces de esta manera. "Los pescados a temperaturas altas buscan la profundidad, no se van a quedar en un solo lado, además tiene una tremenda correntada el río", explicó. También expresó sus dudas y aclaró que son planteos que hace desde el sentido común.
Almaraz contó que realizó una consulta con ingenierxs, y le han manifestado que es posible que los peces mueran por la falta de oxigenación provocada por las altas temperaturas, un efecto del cambio climático. Sin embargo, también le han señalado que esto no implica que no pueda haber contaminación. Para descartarla, le dijeron que es necesario que se hagan análisis del agua y se investigue a fondo.
"El problema más preocupante que tenemos es del agua sobre todo porque el río Salado atraviesa tantísimas comunidades. Las familias han empezado a pedir ayuda, al no llover, y no acceder a otra posibilidad de obtener agua potable, la del río es lo único que tenemos", dijo Corvalán. Expresó que seguirán pidiendo que se investigue porque la gente está sin poder usar el agua del río. En los distintos parajes de los departamentos Copo, Alberdi, Pellegrini, Gimenez y Figueroa, que reciben agua del Salado, han registrado peces muertos.
No solo los peces mueren, también los animales vacunos que toman agua del río. "Hace unos 20 dias, había gente que decía que se estaban muriendo las vacas, pero había pasto", señaló Corvalán. El ganado también bebe agua del río.
Corvalán había solicitado a las autoridades, "que traten de velar por esta gran necesidad y gran preocupación". "Es un tema vital el del agua, miles de familias estamos accediendo (al agua del río) por necesidad", sostuvo y recordó que son las personas más humildes las que dependen de esta agua del Salado en los parajes de Santiago del Estero.
Los equipos del Ministerio de Ambiente de la Nación que hicieron la inspección son de la Dirección de Inspecciones; de la Secretaría de Control y Monitoreo Ambiental y la Dirección Nacional de Gestión Ambiental del Agua y los Ecosistemas Acuáticos.
Antes de la inspección, la comitiva de la cartera ambiental nacional informó que mantuvo una reunión de análisis de la situación con el subsecretario de Medio Ambiente de Santiago del Estero, Carlos Salmoiraghi; con la directora general de Control y Fiscalización Ambiental de la provincia, Isabel Brandán, con la Comisión Municipal de San José del Boquerón.
También en el río Juramento
Desde hace años el MOCASE acompaña la lucha de los Vecinos Autoconvocados de la Cuenca del Río Juramento, en El Tunal, que se opusieron a la instalación de la empresa Austin Powder, productora de nitrato de amonio para la fabricación de explosivos que se utilizan en mineras, las canteras y la construcción. Lxs autoconvocadxs se organizaron ante la presunción de que la empresa contaminaría el ambiente.
"Venimos acompañando a los Autoconvocados en Salta donde había preocupación de los vecinos, sabemos que al tener un daño ambiental que surja de la empresa vamos a pagar el pato", señaló Corvalán. Es que el río Salado tiene enlace con la cuenca del río Juramento. "Sabemos que este tipo de empresas cuando se ubican en un lugar, usan elementos dañinos para la humanidad", añadió el dirigente campesino.
El MOCASE señaló su preocupación por conocer los estudios de impacto ambiental de la multinacional Austin. Corvalán dijo que las empresas como esta dicen que traen “progreso" para los pueblos, pero consideró que "los gobiernos tienen que estar más atentos" para controlar que la actividad que realizan no provoque perjuicios al ambiente y a la población donde se asientan: "El Estado tiene que estar, muchas veces uno dice que el Estado es cómplice (…). Hay responsabilidades de los que nos representan desde el Estado y nos dejan pasar estas cosas", sostuvo.
Salta/12 consultó a Austin por la denuncia del MOCASE a la gerenta de comunicación institucional de Austin, Mariana Faccio, pero no respondió.