Destinadas a imponer la heterosexualidad
Francia prohibió por ley las "terapias de reorientación" sexual
Estas prácticas -organizadas por sectores religiosos y de extrema derecha- se llevan a cabo mediante exorcismos, electroshocks e internaciones para imponer la heterosexualidad a gays, bisexuales y trans. La norma prevé penas de hasta tres años de prisión y 45.000 euros. "No hay nada que curar", tuiteó Emmanuel Macron.










