Tencent Video, la principal plataforma de streaming de China, censuró y modificó el final de El Club de la Pelea, la película de 1999 que protagonizaron Brad Pitt y Edward Norton, dirigida por David Fincher, adaptada de la novela de Chuck Palahniuk

El filme se volvió un clásico de fin de siglo, con escenas de sabotajes, vandalismo y medidas de acción directa contra el establishment. Resultó tan influyente que en los Estados Unidos se armaron "Clubes de la pelea" reales, en los que hombres se reunían a pelear emulando la película y fueron desbaratados por la policía. 

En este caso, en China apuntaron concretamente al final de la película, en cuya versión original estrenada hace 22 años el protagonista demuele con explosivos caseros los edificios de entidades crediticias que contenían registros de deudas, con lo que cumple su meta de atacar la civilización moderna. Las imágenes se cortan justo antes de la explosión final y la acción es reemplazada por un sobreimpreso en pantalla que narra los acontecimientos posteriores y modifica radicalmente la historia.

"La Policía rápidamente develó todo el plan y arrestó a los criminales exitosamente evitando que las bombas explotaran. Tras un juicio, Tyler (el protagonista) fue enviado a un manicomio para recibir tratamiento psicológico y fue rehabilitado y liberado en 2012", indicó el sobreimpreso, en inglés y con la tipografía que manejaba el filme original.


Los censores del Partido Comunista chino suelen estar atentos a mensajes que consideren que pueden alterar el orden o impactar en métodos criminales e inclusive respecto de la homosexualidad, como el caso de Rapsodia bohemia (2018) en la que eliminaron todas las escenas relativas al tema o en Alien: Covenant (2017), cinta de la que también se borró un beso entre androides del mismo "sexo".

No obstante, en muchos casos la distribuidora de las películas se adelanta a la censura y ofrece una edición alternativa ajustada a estándares autoritarios para evitarse problemas. "Para cualquiera al corriente de cómo funciona el negocio entre el dueño de los derechos de una película y las compañías que se los compran para la distribución en ciertas regiones, es claro que la empresa que adquirió los derechos para el mercado chino le vendió esa versión a Tencent Video", aseguró una fuente cercana a la plataforma.

Además, un importador de películas dijo que la práctica es habitual y que "es mejor tener el 99,9 por ciento del filme exhibido legalmente a decenas de millones de personas que no exhibirlo en absoluto".

La película no se había estrenado en su momento en el gigante asiático porque Brad Pitt tenía vedadas sus películas en el país por su participación en Siete años en el Tíbet. En aquella película de 1997 (con escenas rodadas en la Argentina), el personaje del actor se hace amigo del Dalai Lama luego de la invasión china al Tíbet. La prohibición china sobre Pitt terminó en 2016, cuando las autoridades fueron parte de la producción de Aliados, protagonizada por Pitt.