Marina Espíndola tenía 42 años y tres hijes. Ayer, una bala del arma reglamentaria de su expareja le quitó la vida en su casa de Murphy, una pequeña localidad ubicada a unos 150 kilómetros de Rosario. Su hijo de 11 años fue quien corrió hasta la casa de una vecina cuando oyó disparos: tras balear a la víctima, el policía se disparó también a sí mismo. Gabriel Olegario Robles, de 49 años, murió poco después de haber sido trasladado al hospital de Venado Tuerto. Con el femicidio de Marina, ya son tres los casos en la provincia de Santa Fe, donde se suma un travesticidio y al menos dos muertes violentas de mujeres en contexto de la criminalidad. Poco después del sepelio de la mujer, hubo una manifestación hacia la comisaría de Murphy, con la consigna "Basta de violencia de género". Al mismo tiempo, y ante la seguidilla de femicidios, organizaciones y referentes feministas manifestaron que la situación es "preocupante". Desde Seguridad indicaron que varias áreas estaban ayer trabajando en el tema.
Horas antes del femicidio de Marina, las localidades de Carcarañá y Casilda marcharon, el lunes por la tarde, para pedir justicia por Celia Acosta, de 29 años. La semana pasada, la familia de Melani Juárez se manifestó destrozada por el femicidio de la joven de 21 años que fue apuñalada en una pensión de barrio Martin. Los primeros días del año se conoció el travesticidio de Alddana Lorens, que tenía 35 años y agonizó diez días tras recibir un golpe en la cabeza, en la ciudad de Santa Fe. En otro contexto, se registraron también los crímenes de Débora Andino y Natalí Longhi.
En cuanto a este último femicidio, alrededor de las dos de la madrugada del martes, en la casa de calle Ricordi al 200 la escena era de terror. Según se pudo reconstruir, Robles, que prestaba servicios en Melincué, entró a la vivienda donde vivía su expareja con tres hijes que no había tenido con él. El fiscal venadense Horacio Pueyrredón dijo a Télam que en noviembre pasado la mujer había denunciado que el policía "la molestaba" porque quería continuar con la relación que ya había terminado. Desde el Ministerio de Seguridad indicaron que se trató de "una exposición" -no se formalizó como denuncia- y que a raíz de ello, en noviembre se le quitó el arma al acusado, que estuvo haciendo "tareas pasivas", hasta que "hace poco tiempo" le fue devuelta. Por otro lado, trascendió que había intervenido un juzgado de pequeñas causas.
Las mujeres que ayer se manifestaron desde la plaza principal de Murphy hacia la subcomisaría 10, pegada a la comuna, recordaron que Marina había realizado denuncias por hostigamiento y maltrato psicológico. Entre las manifestantes estaban las hijas de la mujer asesinada. El principal reclamo fue que “están para cuidarnos y nos matan”. Argumentaron que la policía desoyó las denuncias de la víctima.
Antes de conocerse el femicidio en Murphy, desde Mujeres Evita publicaron en redes sociales que en los primeros 24 días del año se registraron 27 femicidios en el país, según el Observatorio Lucía Pérez. En un comunicado preguntaron: "¿Qué política pública nos sigue haciendo falta para frenar tanta violencia machista?". Y, señalaron: "Desde los transfeminismos populares entendemos que nos encontramos en un momento crítico y que la transformación de los patrones de una sociedad profundamente machista y patriarcal no es una tarea sencilla, unívoca ni universal. Es fundamental erradicar la violencia de género y aplacar la cara más cruda del patriarcado como los femicidios y transfemicidios; y para esto es necesario mayores y mejores políticas públicas".
En ese sentido cuestionaron también a poder judicial: "Nos revictimiza, no nos escucha, nos subestima, nos da vuelta la cara y nos niega nuestro derecho a medidas de protección por su propia ineficiencia, olvidando la obligación por la que prometieron. Al día de hoy, sigue negándose a cumplir con la Ley Micaela, promulgada en 2019".
Además, manifestaron: "Los datos nos demuestran lo que venimos diciendo en las calles desde el primer #NiUnaMenos. En lo que va del 2022, 22 niñes quedaron sin sus madres", indicaron antes de que ayer se sumaran les tres hijes de Marina. "Nos merecemos vivir sin miedo, libres de violencias, vidas dignas y que el Estado acompañe nuestras decisiones, como la de separarnos y hacer la denuncia para combatir la violencia machista. Desde Mujeres Evita luchamos para que las políticas del cuidado se distribuyan de manera que no recaigan solamente en las mujeres, pedimos por la #ReformaJudicialFeminista, exigimos que se declare la emergencia nacional en violencia de género para contar con los recursos necesarios (...)".
En esa línea, la diputada Lucila De Ponti, agregó que la cifra "ya es 28 (a nivel nacional)", en lo que va de enero, y aseguró a este diario que "es muy preocupante, y en Santa Fe se viene dando una seguidilla de casos", por lo que en Twitter pidió: "Basta. Paren de matarnos".
Por su parte, la directora ejecutiva de Mujeres de la Matria Latinoamericana (Mumalá), Gabriela Sosa, reclamó "por la seguridad de mujeres y disidencias" y dio datos del Observatorio Mumalá sobre violencias de género. "El año pasado en la provincia hubo 33 casos, (entre los cuales hubo) 9 femicidios y 17 muertes violentas en contextos de economías delictivas (otros 7 están en investigación); pero además, hubo 15 intentos de femicidio", enfatizó sobre otras víctimas que debieron ser hospitalizadas.
Al mismo tiempo, dijo que a nivel nacional, de 221 femicidios que registraron el año pasado, el 17 por ciento de los agresores se quitó la vida; y el 12 por ciento de los acusados era integrante de las fuerzas de seguridad, de los cuales el 40 por ciento utilizó el arma reglamentaria para cometer el hecho. "Necesitamos un estado a la par de las mujeres que atravesaron situaciones de violencia porque es una manera de prevención de estos desenlaces fatales", dijo sobre todos los niveles. Y sumó la responsabilidad de la Justicia.
La diputada Mónica Peralta (GEN) manifestó que “los femicidios son evitables si los organismos oficiales trabajan integralmente ante las denuncias que realizan las mujeres”. La legisladora que viene trabajando propuestas haciéndose eco de los casos de femicidios en manos de hombres que pertenecen a las fuerzas de seguridad pública de la provincia, expresó: “En el 2020 presenté un proyecto de ley que propone crear una Dirección Provincial que pueda coordinar a los organismos oficiales estatales en la prevención de violencia de género, unificando criterios y protocolos de acción” , explicó la diputada. "El Estado sigue llegando tarde. Necesitamos más políticas públicas, invertir en recursos, que el gobierno tome esas decisiones, que la justicia forme equipos profesionales y las estructuras adecuadas para ser más diligentes. No podemos seguir mirando para otro lado", afirmó Peralta.