El presidente de la FIFA sigue adelante con su proyecto de armar un Mundial cada dos años. Y en ese afán por imponer ese cambio de paradigma formuló una declaración que levantó polémica en el marco de la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa al asegurar que una Copa del Mundo bianual podría evitar que muchos africanos emigren al Viejo Continente en busca de un futuro mejor.
"El fútbol no es un mero deporte, son oportunidades, es esperanza, equipos nacionales, tiene que ver con el país, con el corazón, la alegría, y no podemos decir al resto del mundo que nos den el dinero y los buenos jugadores, y vean fútbol sólo por la tele", señaló Infantino durante el encuentro que se desarrolla en la ciudad francesa de Estrasburgo y al que fue acompañado por Arsene Wenger, ex entrenador del Arsenal y ahora director de desarrollo del fútbol mundial de la FIFA.
En este sentido, Infantino aseguró que un Mundial cada dos años sería una gran esperanza para África. "Tenemos que darles a los africanos la esperanza de que no tengan que cruzar el Mediterráneo para quizás poder tener una vida mejor aquí. Tenemos que darles oportunidades y dignidad", expresó el máximo dirigente del fútbol mundial, que arrancó su alocución con una pelota de fútbol en sus manos. "El fútbol avanza en una dirección en la que unos pocos lo tienen todo y una gran mayoría no tiene nada", completó.
Durante su presentación, el suizo justificó que la UEFA y la mayoría de los países centrales de Europa desechan la posibilidad de un Mundial bianual porque ya tienen a los mejores jugadores del mundo todas las semanas en sus respectivas ligas. "En Europa se celebra el Mundial dos veces a la semana, porque están los mejores jugadores del mundo", destacó el suizo con su particular visión del fenómeno.