Cientos de personas se manifestaban esta noche en distintos lugares de Uruguay a través de cacerolazos, concentraciones y marchas autoconvocadas para denunciar la cultura de la violación, luego de hacerse pública la denuncia de una mujer que fue abusada el fin de semana por un grupo de varones.
En la capital, Montevideo, la marcha se inició en la Plaza Independencia y concluyó en Plaza de La Cagancha. Y distintas concentraciones se dieron en otras ciudades uruguayas.
A través de una proclama difundida por el movimiento identificado con el término 'Kearda' se explicó que esta violación grupal se suma a la de dos jóvenes de 19 y 26 años, tres niñas de 10 y 12 años y dos mujeres de 30 y 75 años. "Todas han sido violadas estos últimos meses por sus amigos, padres, padrastros, compañeros sexuales, parejas y/o desconocidos", se lee en el escrito.
El fin de semana pasado, una mujer de 30 años fue violada por al menos cuatro hombres, un hecho que la fiscal de Delitos Sexuales Sylvia Lovesio calificó como "inédito en el país".
"Nos reunimos online más de 300 mujeres y disidencias en esta semana y organizamos las concentraciones en todo el país y consensuamos la proclama", contó Erika Vitureira, referente feminista.
En el documento destacan que se manifiestan "contra la cultura de la violación, arraigada y naturalizada como práctica de abuso de poder, de guerra, de colonización, y que aún se mantiene silenciada bajo los mecanismos más perversos, que sostienen los medios de comunicación, la justicia, la familia, la iglesia, los militares, el Estado".
La víctima había ido a bailar a un local del barrio Cordón de Montevideo donde conoció a un hombre que junto a al menos otros tres la violaron.
El presidente de Uruguay, Luis Lacalle Pou, opinó que la pena debería ser "ejemplificadora para estos actos que no son propios del ser humano ni son propios en este caso del género masculino. Nos debería dar vergüenza".
Sobre las declaraciones presidenciales, el documento de las autoconvocadas señaló que Lacalle Pou "no hace más que negar la realidad y esconder un problema gravísimo que tenemos como sociedad. ¡Entérese señor Presidente que los violadores son seres humanos y principalmente varones hijos sanos del patriarcado!".
Y le solicitaron que "se retracte con palabras y acciones certeras y contundentes que demuestren su responsabilidad como mandatario de Estado de proteger a toda la ciudadanía, incluidas las mujeres, disidencias, niñas, niños y adolescentes".
Para cambiar esta cultura violenta, solicitaron educación sexual integral "desde la primera infancia para conocer y cuidar nuestros cuerpos, así como respetar los cuerpos de las demás personas" y que "la sociedad se comprometa desde otros espacios de muchísima influencia como lo son los medios masivos de comunicación".
Además pidieron "fortalecer los recursos y presupuestos que garanticen la protección integral, reparación y justicia a las víctimas en todo el país".