La familia de Federico Mazzoni, el argentino asesinado a balazos cuando trabajaba como gerente general de un complejo gastronómico de la localidad balnearia mexicana Playa del Carmen, continúa realizando los trámites de repatriación para poder enterrar el cuerpo en su Córdoba natal.
Hasta el momento, solo hay un detenido: un hombre que ayudó a los sicarios a escapar de la escena del crímen en motos de agua. No obstante, la Justicia del Estado mexicano de Quintana Roo sigue en la intensa búsqueda de los dos sicarios que asesinaron a Mazzoni.
Según informaron medios mexicanos, dos de los cuatro hermanos de Mazzoni permanecían en México para acelerar los trámites de un posible traslado aéreo del cuerpo. Hasta el sábado, las reuniones en la Embajada argentina en México estaban avanzadas.
Mazzoni (42) fue asesinado el martes. Había llegado a México en 2002 y gerenciaba el complejo "Mamita's Beach Club", situado en la calle 28 de Playa del Carmen, en la Riviera Maya, un centro turístico internacional.
El fiscal del caso, Oscar Montes de Oca Rosales indicó que "no existían denuncias previas ante la justicia por parte de Federico y del local", pero sí "tenían varias quejas" con algunas personas que merodeaban por la zona.
"Ellos se venían quejando porque se habían establecido una suerte de 'camastros' de manera ilegal frente a este club de playa. Estos 'camastros' generalmente están vinculados a la venta de droga, y suelen radicarse en espacios públicos, los cuales son ocupados por estas personas", detalló.
El fiscal aseguró que “vamos a seguir avanzando y yo creo que pronto daremos mayores resultado. Tenemos que aprender y mejorar estos temas de prevención, nos queda claro, tenemos que afinar nuestras estrategias, optimizar los procesos de investigación, tenemos que ir más adelante que la delincuencia y cada día estamos capacitándonos”, agregó.