El presidente Alberto Fernández afirmó este lunes, durante una recorrida en Loma Hermosa por la planta Gráfica Argentina, donde se imprimen los ejemplares del programa "Libros para aprender", que el 2022 debe ser el "año de la educación", el año para recuperar "todo lo que postergó la pandemia". 

"Necesitamos que nuestros chicos reciban el mejor aprendizaje y lo hagan en la escuela pública", expresó Fernández sobre el programa que contempla la distribución de libros de texto de matemática y lengua en escuelas primarias de todo el país. 

"Este tiene que ser el año de la educación. Todo lo que nos postergó la pandemia tenemos que recuperarlo este año, y una forma de recuperarlo es que todos los chicos tengan en su primer día de clases los libros que necesitan para poder aprender", dijo el mandatario nacional.

En la recorrida, el jefe de Estado presenció una demostración del proceso de impresión y recibió uno de los libros. Estuvo acompañado por el ministro de Educación, Jaime Perczyk; el intendente de San Martín, Fernando Moreira; el socio gerente y fundador de la gráfica, Carlos Rinaudo, y los socios Marcelo Rinaudo, Julián Rinaudo, Alicia Rinaudo y Guillermo Medici.

En ese marco, remarcó la importancia de "revitalizar el hábito de la lectura" en los y las estudiantes del país. "A veces los alumnos llegan a la facultad con dificultad para entender los textos. Ahí hay un déficit que debemos mejorar y creo que por esta vía, dándole a cada alumno y alumna de la Argentina el material que tiene que leer, estamos dando un paso en favor de la democratización de la educación", subrayó.

En planta Gráfica Argentina de Loma Hermosa "están en condiciones de hacer 35 mil libros. Hay muchas industrias como ésta", aseguró Fernández. Y agregó: "estamos llevando los libros a alumnos de todo el país, todos están incluidos porque la Argentina que necesitamos construir para el futuro es una Argentina que no deja a nadie afuera".

A través de esta iniciativa, que apunta a mejorar la calidad educativa, la cartera nacional distribuirá 7.171.652 manuales, que fueron elegidos de modo federal por cada jurisdicción. Se espera que el programa alcance a 3.577.464 estudiantes de 18.849 escuelas públicas de gestión estatal o privadas de cuota cero u oferta única, y requerirá una inversión de 5.243.000 pesos.

"El programa va a distribuir libros a todos los chicos, por primera vez, uno a uno, desde Jujuy a Tierra del Fuego", destacó el ministro de educación, Jaime Perczyk. Los estudiantes podrán llevar los textos de la escuela a la casa y de la casa a la escuela, ya que serán de su propiedad, lo que permitirá mejorar la organización del proceso de enseñanza y aprendizaje, profundizar el trabajo con los contenidos, optimizar el tiempo en el aula y darle continuidad al trabajo pedagógico en los hogares.

El programa, señaló el titular de la cartera educativa, también consistirá en la entrega de libros específicos para los docentes y la realización de capacitaciones a maestros y maestras que se desarrollarán a lo largo del año para intensificar los aprendizajes en las áreas mencionadas.