El presidente del Supremo Tribunal Federal de Brasil, Luix Fux, afirmó que si bien los debates acalorados forman parte del comportamiento en un ámbito marcado por la pluralidad de visiones, advirtió que para este año electoral “no hay más espacio para acciones contra el régimen democrático y para la violencia contra las instituciones”. La máxima corte brasileña se encuentra en un momento de crisis con el mandatario Jair Bolsonaro.
Fux inauguró el año judicial en el gigante sudamericano con un discurso en el que subrayó la importancia de que no se repitan los ataques al STF protagonizados por Bolsonaro en septiembre de 2021. Ese día, ante una multitud convocada por él anunció que no iba a respetar los fallos del tribunal en su contra.
"Este tribunal supremo, guardián de la Constitución, convoca a los brasileños para que el año electoral sea marcado por la estabilidad y por la tolerancia porque no hay más espacios para acciones contra el régimen democrático y para la violencia contra las instituciones públicas", dijo Fux en su discurso.
El 7 de septiembre de 2021, cuando Brasil celebraba 199 años de independencia, Bolsonaro convocó a manifestaciones golpistas en todo el país para exigir la disolución del congreso y el STF a través de una “intervención militar”, la tensión se mantuvo durante tres días hasta que el mandatario retrocedió en sus amenazas y se disculpó.
En los últimos años, el presidente del tribunal había defendido la Operación Lava Jato, votó en contra de la anulación por lawfare en las causas del exjuez Sergio Moro que condenaron al expresidente, Lula da Silva, hoy favorito en los sondeos para la presidencia de Brasil. En marzo del año pasado, el magistrado Luiz Edson Fachin, quien en su momento apoyó la causa de Lava Jato, anuló el fallo armado por Moro contra Lula.
En tanto, el expresidente de la Orden de Abogado de Brasil (OAB), Felipe Santa Cruz, habló en la ceremonia y remarcó que este año es uno de los más importantes para la democracia brasileña desde 1988. “Estaremos atentos para que ningún tipo de amenaza a las elecciones, a sus resultados o a los elegidos ponga en peligro la voluntad soberana del pueblo brasileño”, consigna el diario Folha de Sao Paulo.
A su vez, Santa Cruz dijo que confiaba en que el STF mantendrá “la misión de luchar contra las fake news, el discurso de odio, el intento de difundir mentiras sobre las urnas electrónicas”. Este martes Santa Cruz le entregó la presidencia de la OAB a Beto Simonetti para el periodo de 2022-2025.
Los 11 miembros de la máxima corte de justicia de Brasil investigan a Bolsonaro en varios causas vinculadas a la desestabilización del sistema constitucional, divulgación de documentación confidencial, difusión de noticias falsas sobre los comicios de 2018 así como de las elecciones que tendrán lugar el dos de octubre.
La semana pasada el presidente brasileño se negó a comparecer ante la corte en el marco de una investigación que lo señala por divulgar documentos confidenciales. Bolsonaro debía declarar ante el juez Alexandre de Moraes, que también investiga a bolsonaristas acusados de planificar un golpe de Estado. Este martes el mandatario estaba invitado a la ceremonia que reúne a los altos mandos del gobierno, sin embargo no participó. En cambio, viajó a San Pablo para reunirse con intendentes de los municipios afectados por las inundaciones donde desde el sábado registaron al menos 24 muertes.