Después de un vertiginoso día de reuniones, llamados y negociaciones, el presidente Alberto Fernández, antes de partir a Rusia, definió que el nuevo presidente del bloque oficialista en la Cámara de Diputados, y el reemplazante de Máximo Kirchner, --que se fue del cargo por no estar de acuerdo con el entendimiento al que el Gobierno llegó con el FMI--, será el diputado santafesino Germán Martínez.
El flamante titular de la bancada oficialista en la Cámara Baja aseguró, tras reunirse con el Presidente en Casa Rosada, que "tenemos 500 días muy intensos hasta las elecciones de 2023 y nuestra tarea es que los argentinos vivan mejor y que la Argentina crezca y tenga muchas más posibilidades. En eso voy a estar al lado del Presidente y también al lado de Máximo, trabajando juntos". Luego, Martínez agregó que el líder de La Cámpora "está llamado a ser un protagonista en los próximos años de la política argentina y voy a estar trabajando para que el FdT tenga todas las chances posibles para que en 2023 podamos consolidar este camino".
Martínez recibió la noticia de que sería el nuevo jefe de bloque mediante una llamada que le hizo el titular de la Cámara, Sergio Massa, la misma tarde del martes. En esa comunicación le dijo que era convocado por el Presidente para ocupar el cargo y que se reuniría con él en la Casa de Gobierno.
Primeras definiciones de Germán Martínez
En un primer contacto con la prensa, Martínez puntualizó que "confío en el camino que trazó el Presidente con el acuerdo anunciado el viernes junto al ministro de Economía, Martín Guzmán, y me parece que tenemos que hablar mucho, escuchar mucho, persuadir, conversar, analizar y aportar". "En mí van a encontrar alguien que tenga una actitud proactiva en defensa de las decisiones del Presidente. No se trata de tener diferencias entre nosotros, sino de tener una postura clara y una solución clara al gravísimo problema de la deuda que engendró el gobierno anterior", agregó. Por último, el nuevo presidente del bloque del FdT en Diputados destacó que "mi intención es conversar con cada uno de los integrantes de mi bloque y poder tener el pulso más fino de la posición de cada uno de ellos sobre este tema".
Sobre su relación con MK, indicó que estuvo en comunicación con él, incluso antes de que empiece a sonar su nombre como reemplazo. "Obviamente le dije mi sentir, como compañero, sobre lo que anunció ayer (por el lunes). Me provocó una fuerte consternación porque tengo una admiración especial hacia él. Me tocó trabajar estos dos años a su lado y lo vi hacer una tarea enorme". También aclaró que aún no conversó con Cristina Fernández de Kirchner, pero que su intención es hacerlo en el corto plazo. Sobre la vicepresidencia del bloque en Diputados, que ocupa la diputada Cecilia Moreau --el martes por la tarde puso su renuncia a disposición-- dijo que "me encantaría que todos los que estaban trabajando con Máximo puedan continuar haciendo su tarea, pero no me quiero adelantar porque no pude conversar con ella todavía".
Cómo se eligió al sucesor de Máximo Kirchner
Los teléfonos de la casa de Gobierno comenzaron a ponerse al rojo vivo minutos después del llamado que el propio Máximo Kirchner le hizo a Fernández la tarde del lunes para avisarle que dejaría su cargo y que su madre, Cristina Fernández de Kirchner no estaba de acuerdo con esa decisión. El Presidente habló con el titular de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, que el martes por la mañana, cerca de las diez, se dirigió a la Quinta de Olivos para reunirse con el mandatario y tomar una definición. Fernández, en una entrevista que dio minutos después de que MK hizo pública su renuncia, ya había adelantado que la definición de su reemplazante sería tomada el mismo martes, antes de partir hacia Rusia y China, en lo que será su primera gira internacional del año y a la que se va con un principio de entendimiento con el FMI.
En la reunión cumbre entre Massa y Fernández en Olivos, que duró cerca de cinco horas --estuvieron desde las 10 de la mañana hasta casi las tres de la tarde--, ambos barajaron candidatos y evaluaron posibilidades. Al salir, Massa aclaró que no estaba en duda la unidad del espacio y que "en la misma carta del todavía presidente del bloque plantea que hay unificación más allá de los matices”. Por los pasillos de la Casa Rosada, mientras tanto, sonaban los nombres de los diputados José Luis Gioja; Eduardo Valdés; Leandro Santoro; Germán Martínez y hasta de Cecilia Moreau como posibles reemplazantes. Por la tarde, Valdés desmintió la versión y lo mismo hizo Santoro.
Los ministros que tienen oficina en Balcarce 50, en tanto, mantenían sus agendas con supuesta normalidad, pero sin dudas en todas las reuniones que se llevaron a cabo en la jornada, la renuncia de Máximo fue el tema central. El jefe de Gabinete, Juan Manzur, por ejemplo, se reunió con el canciller Santiago Cafiero; con el ministro de Economía, con el secretario de Asuntos Estratégicos, Gustavo Béliz; con los ministros de Obras Públicas, Gabriel Katopodis y de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, y con el de Agricultura, Julián Domínguez. Por la tarde, lo hizo con los gobernadores de Catamarca, Raúl Jalil, de Formosa, Gildo Insfrán y con Gerardo Zamora de Santiago del Estero.
Las instrucciones de Alberto Fernández
Las dudas y las especulaciones se disiparon cuando pasadas las siete de la tarde Massa y Martínez ingresaron juntos a la Casa Rosada para ver al Presidente. En esa reunión, además, estuvo Manzur. En el encuentro que tuvieron los cuatro en el despacho del mandatario, Fernández le pidió a Martínez que converse con todos los diputados del oficialismo, que avance fuertemente en consolidar la unidad del bloque y que le dedique "el 100 por ciento del tiempo a la función que le asignó". También dialogaron sobre los desafíos que tendrá en esta nueva etapa el bloque, aunque el propio Martínez aclaró que no cree "que estemos en ninguna nueva era porque me considero parte de un camino mucho más largo".
Otro de los tópicos que formó parte del menú en esta primera charla entre el Presidente y el jefe de la bancada oficialista en Diputados, fueron los temas que se tratarán en extraordinarias. Fernández le dijo que la prioridad son los proyectos vinculados a la producción. Martínez, según supo Página/12, considera que esta semana será más de un trabajo "puertas adentro" y de conversaciones y organización con su bloque y que la semana que viene podrá dedicarse a organizar la grilla de comisiones, junto con la oposición, sobre todo para definir aquellas que son más necesarias para poder avanzar en los proyectos que el Ejecutivo envió a extraordinarias, como el Agrobioindustrial y el de Electromovilidad, entre otros. Fernández, mientras Martínez hablaba con la prensa, dejó la Casa Rosada para ultimar los detalles y subirse al avión que lo llevó a Moscú.