El presidente Alberto Fernández se reunió con su par chino Xi Jinping en la ciudad de Beijing y tras el encuentro abandonó el gigante asiático para dirigirse a Barbados, la última escala de su primera gira internacional del año. En la bilateral --que en un comienzo iba a ser de 20 minutos, pero que terminó durando una hora-- el mandatario cerró un gran acuerdo de inversión y cooperación económica, y también se convirtió en el primero de los tres grandes países de la región --aún no lo hicieron México y Brasil-- en incorporarse a la Ruta de la Seda, que permitirá al país contar con un financiamiento por más de 23 mil millones de dólares para diversos proyectos. Los acuerdos a los que se llegó con dicho país están relacionados al desarrollo verde, economía digital, desarrollo espacial, tecnología e innovación, educación y cooperación universitaria, agricultura, ciencias de la tierra, medios públicos de comunicación y energía nuclear.
En China, Fernández también consiguió que Xi Jinping señale que están dispuestos a estudiar proyectos de canalización de Derechos Especiales de Giro del FMI y de expansión de su uso. También manifestaron la necesidad de que el organismo lleve a cabo una revisión de su política de sobrecargos. El Presidente destacó que "la decisión de China de incentivar un mayor uso de las monedas nacionales en el comercio y las inversiones y de apoyar el reclamo argentino de la revisión de la política de sobrecargos del FMI son avances cruciales". El canciller Santiago Cafiero, en tanto, se refirió a la incorporación del país a la Ruta de la Seda y dijo que se trata de "una decisión estratégica" y lo calificó como "un nuevo hito en la relación bilateral" con China.
El financiamiento logrado se desembolsará en dos tramos: uno, ya aprobado, por 14 mil millones de dólares, comprende diez proyectos de infraestructura entre los que estará una cuarta Central Nuclear, líneas de transmisión, gasoductos, represas y ferrocarriles, entre otros. Y un segundo paquete por 9.700 millones de dólares. En la reunión, los mandatarios destacaron la renovación del Acuerdo de SWAP en 2020 y acordaron que seguirán estrechando la cooperación de los mismos, con el fin de incentivar un mayor uso de las monedas nacionales en el comercio y las inversiones.
Según informaron miembros de la comitiva a Página12, ya hay diez proyectos que están firmados. Algunos, por ejemplo, tienen tramos de financiamiento que se cumplieron y con la nueva financiación continuarán. Es el caso del ferrocarril Belgrano cargas y las dos represas que se están construyendo en Santa Cruz, por ejemplo. Por otro lado las inversiones se utilizarán en obras como gasoductos; tendidos eléctricos en la zona norte del AMBA y otros nuevos proyectos que comenzarán desde cero para los cuáles se deberá hacer el proceso licitatorio. "Con el Fondo se llegó a un acuerdo y ahora se está terminando la parte técnica. Estas inversiones son otra cosa porque aliviarán al país y lo ayudarán a seguir creciendo", aseguran desde el Gobierno.
Sobre el encuentro, miembros de la comitiva argentina describieron que "hubo mucho entusiasmo". En un primer momento el clima fue protocolar. Allí el Presidente le agradeció a Xi Jinping lo que había hecho su país por el nuestro con los envíos de vacunas. En ese contexto, el mandatario argentino comparó el envío de las dosis de Sinopharm con un hecho que sucedió en la década del '50, cuando el entonces presidente, Juan Domingo Perón, cerca del final de la Revolución china de 1949 --y mientras el país asiático transitaba problemas de hambruna-- instruyó a su ministro de Comercio Exterior, Antonio Cafiero, para enviar excedente de granos a la China del líder Mao Tse-Tung. Luego, le contó que ese ministro era el abuelo del actual canciller, Santiago Cafiero, quien también formaba parte de la comitiva. Cuando sucedió eso, el presidente chino miró a los ojos al canciller que también estaba presente en la sala, puso la mano en su pecho y le hizo una reverencia que el resto de la mesa replicó. Al salir de la reunión Cafiero le contó emocionado todo lo que había sucedido a su familia.
Esa anécdota sirvió para distender el ambiente y Xi comentó que había escuchado el discurso de Fernández cuando participó de forma virtual del aniversario del partido Comunista Chino, donde habló en su rol de Presidente y también de titular del PJ. En aquella ocasión, Fernández contó la historia del peronismo, y el asiático le dijo que había sido una disertación muy interesante. En ese contexto, el Jefe de Estado le comentó que siempre el peronismo en Argentina intentó hacer un país más industrializado, con distribución del ingreso y recordó que cada tanto esos procesos se ven interrumpidos por golpes militares o políticas liberales. La última, le explicó, fue el gobierno de Mauricio Macri y el préstamo que pidieron al FMI.
Otro pedido de Fernández al mandatario chino, fue el ingreso de la Argentina al BRICS. Xi Jinping aseguró que lo iba a apoyar, de modo que durante la gira se consiguió el apoyo de Rusia y China para tal objetivo. Desde la comitiva destacarn que el Presidente argentino "fue al hueso" con este tema y le planteó al presidente ruso, Vladimír Putin y a Xi Jinping que quería que la Argentine entre a los BRICS. Encontró buenas respuestas y eso es importante porque los BRICS tienen un banco que sirve para el financiamiento. Hay que esperar que los demás países acepten el ingreso, pero este es un gran paso". Cuando Fernández se estaba yendo, se acercó a Xi y le dijo: "si usted fuera argentino, sería peronista". Los dos se rieron.
En la declaración conjunta, detallaron 22 puntos en los que hubo entendimiento. Todos vinculados a la importancia de fomentar la confianza mutua y reforzar los intercambios para profundizar la Asociación Estratégica Integral en el marco del 50 aniversario de las relaciones diplomáticas. Acordaron seguir ampliando el volumen comercial, promover el apoyo financiero para el pago de las exportaciones chinas a la Argentina e incentivar la diversificación del comercio. También destacaron la firma del “Plan de Acción Estratégico en materia de Cooperación Agrícola 2022-2027" y destacaron la importancia de la cooperación científico-tecnológica. En ese sentido, resaltaron la próxima puesta en marcha del radiotelescopio CART, uno de los mayores de la región; celebraron la cooperación estratégica en el ámbito de los usos de la energía nuclear y valoraron la cooperación bilateral en materia espacial.
La última actividad de Fernández en Beijing fue recorrer las instalaciones del Centro Tecnológico Huawei. Allí, el Jefe de Estado conversó con los principales directivos de la empresa. Tras la visita, partió hacia Madrid, donde pasó la noche antes de seguir a Barbados. En Bridgetown se entrevistará con la primera ministra, Mia Mottley, una de las mayores referentes en las discusiones sobre el cambio climático.