El ciclón Batsirai en Madagascar dejó al menos 80 muertos, y unos 60.000 evacuados, según el balance oficial de la oficina de Gestión de Riesgos y de Catástrofes local.

La Oficina Nacional de Gestión de Riesgos y Catástrofes, que recopila los datos enviados desde las regiones afectadas, especialmente en la orilla oriental de esta isla, anunció que el número de víctimas pasó de 30 a 80 en las últimas horas. La mayoría de las muertes ocurrieron en el distrito de Ikongo.

Además, el organismo indicó que más de 94.000 personas se vieron afectadas y casi 60.000 fueron evacuadas en este país del océano Índico donde numerosas ONG y agencias de la ONU empiezan a desplegar recursos y equipos, informó la agencia de noticias AFP.

En tanto, las autoridades locales alertaron que el balance puede empeorar porque siguen encontrando cadáveres entre los escombros causados por la tormenta.

El ciclón tropical tocó tierra en Madagascar en la noche del sábado con vientos de 165 kilómetros por hora, luego de pasar por la isla francesa de la Reunión. Ingresó por una zona costera de 150 kilómetros de largo, poco poblada y agrícola, luego se dirigió al oeste, provocando crecidas de los ríos que devastaron los arrozales, el "granero de arroz" de Madagascar en el centro del país, según las autoridades.

Según Jean Benoit Manhes, representante adjunto de Unicef en Madagascar, el impacto del ciclón “no termina hoy, va a durar varios meses, y su impacto será agrícola", por los destrozos en los arrozales.

"Los arrozales están dañados y las cosechas de arroz perdidas. Es la principal cultura de los malgaches y su seguridad alimentaria estará gravemente afectada en los próximos tres a seis meses si no actuamos rápidamente", expresó Pasqualina DiSirio, directora del Programa Alimentario Mundial (PAM) en el país, uno de los más pobres del planeta.