El primer ministro británico, Boris Johnson, suma más dolores de cabeza por su comportamiento en plena etapa de restricciones sanitarias. Criticado por el Partygate, esto es, la revelación de reuniones sociales del premier mientras regían las limitaciones por la pandemia de coronavirus, ahora afronta la aparición de una foto que certifica el nulo apego a las normas de su propio gobierno.
El Daily Mirror divulgó este martes una foto de Johnson en una fiesta en diciembre de 2020, cuando el país atravesaba restricciones por la Covid-19. En la imagen que se dio a conocer, el líder conservador está con miembros de su staff en actitud jocosa, con una botella de champagne sobre la mesa y un colaborador con una corona de guirnaldas.
La foto corresponde al 15 de diciembre de 2020, un hecho cuya existencia motivo pedidos de investigación a la policía por parte de la oposición laborista. Para ese momento, Londres atravesaba un confinamiento de Fase 2 y no se permitía más de dos personas en interiores, salvo excepciones pro cuestiones laborales.
"No debe haber almuerzo o fiesta de Navidad en el trabajo, donde se trata de una actividad principalmente social y no está permitido por las reglas de su nivel", fue la orden impartida por el gobierno de Johnson, que ahora alega que el premier "participó virtualmente brevemente" para agradecer a sus colaboradores por el trabajo durante el primer año de pandemia.
Fiesta navideña
El abogado Adam Wagner es uno de los que reclama que se investigue "lo que sugiere una fiesta navideña". Resaltó que "esto se llevó a cabo en un momento en que las reuniones sociales en interiores de dos o más personas estaban prohibidas y el gobierno había dicho a las personas que 'no debían' tener una fiesta de Navidad".
También recordó que se investiga una reunión similar en la oficina del secretario del Gabinete, ocurrida dos días después, con lo que "no tiene sentido que esta reunión no sea investigada por la policía". De momento, están bajo la lupa doce reuniones y Johnson dice que la reunión a la que corresponde esta imagen ya fue investigada.
El Partygate apunta a al menos 16 reuniones entre mayo de 2020 y abril de 2021, que han escandalizado al país en las últimas semanas. Unas de las primeras ocurrió el 15 de mayo de 2020, en el primer confinamiento: Johnson degustó comida con varias personas cuando no estaba permitido. Cinco días después hubo otro encuentro similar con unas cien personas y Johnson dijo que fue porque lo consideró una reunión de trabajo.
Sin embargo, de todas las reuniones al margen de propias normas del gobierno de Johnson, la que más impresiona a los británicos es una que tuvo lugar la víspera del funeral duque de Edimburgo, marido de Isabel II, fallecido en abril de 2021. La monarca despidió a su esposo en una ceremonia íntima, marcada por el protocolo anti-Covid, mientras que Johnson había estado reunido horas antes, en pleno luto y con las restricciones por la pandemia.
Sue Gray, encargada de la investigación, ha examinado documentos y entrevistado a unas 70 personas, además de revisar correos electrónicos y mensajes de WhatsApp, así como entradas y salidas de dependencias del gobierno. Según su informe respecto de los encuentros de Johnson "algunos de los comportamientos que rodean estas reuniones eran difícilmente justificables".
Además, plantea "fallas de liderazgo y de juicio por diferentes partes de Downing Street y de la Oficina del Gabinete en diferentes momentos", y criticó el "consumo excesivo e inapropiado" de alcohol en las oficinas gubernamentales.