Empieza a jugarse por los puntos en el fútbol argentino. Después de una larga pretemporada, el comienzo de la Copa de la Liga Profesional pone en marcha el ejercicio futbolístico oficial 2022 que, entre el lunes 21 de noviembre y el domingo 18 de diciembre, desembocará en el máximo acontecimiento del año: el Mundial de Qatar. La Selección Argentina ya tuvo acción con la doble fecha de Eliminatorias que se jugó entre fines de enero y principios de febrero y volverá a tenerla a fines de marzo, cuando se dispute la última ventana clasificatoria, y en las fechas FIFA previstas para junio y septiembre. Los equipos de Primera y del ascenso arrancarán este fin de semana y deberán terminar su actividad, siete días antes de la Copa del Mundo.
La Copa de la Liga Profesional presentará cuatro partidos este jueves (Patronato-Argentinos, Sarmiento-Atlético Tucumán, Newell's-Defensa y Justicia y Central Córdoba de Santiago del Estero-Barracas Central). Y se jugará a paso redoblado: la fase de grupos de 14 fechas terminará el domingo 8 de mayo, el miercoles 11 tendrán lugar los cuartos de final a partido único (se clasificarán los cuatro primeros de cada zona), el domingo 15 irán las semifinales y el domingo 22, la gran final. Tendrá una gran novedad: desde la cuarta fecha, prevista en principio para el último fin de semana de febrero, por fin hará su aparición en las canchas argentinas el VAR, segura fuente de polémicas y entredichos.
Pero a partir de abril, la competencia estará entrecruzada por los torneos continentales que serán prioridad para los equipos argentinos clasificados. Y afiebrada obsesión para River y Boca que fortalecieron sus planteles para ganar la Libertadores sin descuidar demasiado la actividad de cabotaje. River repatrió al colombiano Juan Fernando Quintero desde China y a Esequiel Barco, Tomás Pochettino, Emanuel Mamanna y Leandro González desde los Estados Unidos. Y del medio local contrató a Elías Gómez (Argentinos Juniors) y Andrés Herrera (San Lorenzo). Boca, a su vez repuso los goles de Darío Benedetto desde España y trajo de México a Pol Fernandez y a Jorge Figal de la MLS estadounidense.
Queda más que claro que como cada año, en el Monumental y en la Bombonera, la Copa será la medida de todas sus cosas. Colón, Vélez y Talleres de Córdoba (que después de 20 años vuelve a disputar la fase de grupos) también le darán prioridad a la Libertadores, pero sin la fijación que carcome a riverplatenses y boquenses. Estudiantes de La Plata se sumará a este pelotón si es que consigue superar las dos etapas de la fase clasificatoria. Y en la Copa Sudamericana (que como el año pasado se jugará en paralelo con la Libertadores) Independiente, Racing, Lanús, Defensa y Justicia, Banfield y Unión de Santa Fe estarán levantando las banderas del fútbol argentino.
Luego del cierre de la Copa de la Liga Profesional, habrá una semana de descanso y el primer fin de semana de junio se iniciará el campeonato de la Liga con los mismos 28 equipos que jugaran 27 fechas a una sola rueda. Como el Mundial apura y los equipos sobran, deberá haber cuatro o cinco fechas entresemana para poder consagrar el campeón y los dos descensos a la Primera Nacional (que vuelven tras haberse estado suspendidos dos años por la pandemia) y jugar el Trofeo de Campeones a principios de noviembre. Más o menos por esa fecha, también habrá de definirse la Copa Argentina, que arrancará la última semana de febrero.
En el segundo semestre del año, se acentuará la obsesión por las copas continentales a medida de que los equipos argentinos puedan ir avanzando. Los octavos de final de la Libertadores comienzan el 28 de junio, los cuartos y las semifinales sucederán en agosto y la final está prevista para el sábado 29 de octubre en Guayaquil (Ecuador). Por su parte, la Copa Sudamericana se definirá el 1º de octubre en el estadio Mané Garrincha de Brasilia. Por los campeonatos y las copas, habrá sobredosis de fútbol en 2022. La pelota empieza a correr a partir de ahora y ya no hay manera de pararla.