Para el gobierno nacional, el 2022 tiene que ser "el año de la educación", en el que "la normalidad vuelva a existir" en las escuelas y regresen los chicos que se desvincularon por la pandemia. Ese fue el espíritu del discurso del presidente Alberto Fernández este jueves, al clausurar una reunión conjunta de los Consejos Federales de Salud y de Educación, con la participación de representantes de todas las provincias y una imagen de unanimidad y consenso. Junto a los titulares de los Ministerios de Salud y Educación, Carla Vizzotti y Jaime Perczyk, el mandatario presentó "Aula segura", protocolo para todos los niveles educativos, que como novedades principales elimina las burbujas y establece el uso de barbijo en espacios cerrados desde primer grado. El anuncio llegó después de que el gobierno porteño --que ya oficializó sus propias pautas-- planteara que los protocolos ya no hacen falta. Por eso, la Unión de Trabajadores de la Educación ponderó los "cuidados" recomendados ante el "negacionismo" de la administración de la Ciudad.
Del encuentro en el Museo del Bicentenario participaron ministros de Educación y Salud de las 24 jurisdicciones, con quienes se terminaron de definir las nuevas pautas construidas en función de los consensos alcanzados con la participación de la Organización Panamericana de la Salud, Unicef, Unesco, la Sociedad Argentina de Pediatría, la Defensoría de los Derechos de las Niñas, Niños y Adolescentes y los gremios docentes. Todos los sectores estuvieron en el acto.
El documento, que aplica para nivel inicial, primario y secundario, incluye seis pilares: asistencia cuidada, vacunación, uso de barbijo, ventilación, higiene y limpieza y distancia. Hasta ahora, de manera oficial, solamente CABA dio a conocer sus propias pautas. En los últimos días se supo también que Santa Cruz se diferenciará del resto del país por pedir pase sanitario. En Formosa también lo están pensando.
En CABA, el barbijo será obligatorio recién a partir de tercer grado. Esta decisión generó malestar en la Unión de Trabajadores de la Educación (UTE). Eduardo López, su secretario general adjunto --también secretario gremial de Ctera-- calificó la medida porteña de "negacionista" y la contrapuso al mensaje del gobierno nacional, que sigue hablando de "protocolos y cuidados". "(La ministra de Educación porteña, Soledad) Acuña dijo que 'protocolo' es una palabra rara que hay que eliminar. Hoy (por ayer) todos lo discutimos en la reunión, inclusive ella, y no dijo que era una palabra rara. Tampoco habló sobre lo del barbijo. Los protocolos no son un capricho político. Capricho político es eliminar un cuidado y no hacerse cargo", cuestionó el dirigente, en diálogo con Página/12. "El gobierno porteño tiene que llevar adelante las resoluciones del Consejo Federal. Vamos a exigirlo. Calculo que va a ir a la Corte Suprema. Pero tiene la batalla cultural y sanitaria perdida: cada niño vacunado es una desautorización a la conferencia de Larreta", concluyó. Para la UTE, el uso de tapabocas debería ser recomendado inclusive en los jardines, de los cuatro años en adelante.
Tras los anuncios se expresó también el director General de Cultura y Educación de la provincia de Buenos Aires, Alberto Sileoni, quien opinó en diálogo con AM750: "La educación es conocimiento, enseñanza, aprendizaje, pero también vincularidad, socialización, necesidad del otro. Eso se ha dañado". Es lo que este año se busca revertir. En la provincia, el uso del barbijo será obligatorio en la educación primaria "sin ninguna distinción". No se exigirá el pase sanitario, sino que se dará "aliento a la vacunación". "Nos diferenciamos de algunos sectores que creen que la vacuna es una decisión del ámbito privado", planteó Sileoni, en una señal al gobierno porteño, y consideró que se debe "mejorar" en la vacunación de niños y niñas de entre tres y 11 años. También se refirió a las paritarias: "Hay un clima con espíritu de acuerdo. La demanda de los gremios es sensata; creo que vamos a poder acompañar".
"Trabajar para que vuelvan a la escuela"
"Tenemos que hacer del 2022 el año de la educación y que la normalidad vuelva a existir en los colegios", manifestó el Presidente al presentar "Aula segura", y pidió hacer "el esfuerzo mancomunadamente". "No debe haber diferencias ideológicas, partidarias; este no es un año electoral y esta es una obligación de todos nosotros, que no vamos a tener una mejor sociedad si nuestros chicos no se educan y no vamos a tener una mejor educación si las salas donde se educan no son seguras", dijo.
"Somos sobrevivientes de una pandemia que se llevó la vida de más de 100 mil argentinos y de millones de la humanidad. Esto nos impone un deber ético y moral, el de construir un mundo mejor. Y poder brindar desde el Estado la mejor calidad en materia sanitaria y educativa. El esfuerzo es mayor porque la pandemia dejó efectos psicológicos muy profundos en nuestros jóvenes", definió.
Por eso, hizo hincapié en la necesidad de "trabajar para que vuelvan a la escuela" todos los chicos que se alejaron de las aulas durante la pandemia: "A muchos jóvenes les cuesta ver el futuro, han tenido un gran desaliento, han dejado el colegio. La tarea por delante es compleja, porque tenemos que recuperar el ánimo y volver a llevar a cada chico al colegio". La deserción en los dos últimos años de secundario fue el motivo por el cual las becas Progresar, dirigidas a universitarios, se ampliaron para ese sector, indicó. Contó que en su visita a China pudo conocer un programa que buscarán implementar en ese país para "ayudar a los jóvenes a salir del estado postraumático que dejó la pandemia".
La importancia de la vacunación
Vizzotti fue la encargada de poner sobre la mesa las estadísticas de la campaña de vacunación. El 75 por ciento de los niños de tres a 11 años iniciaron su esquema, en tanto que los adolescentes lo hicieron en un 90 por ciento. El 92 por ciento de los docentes de todo el país lo completó. Para la funcionaria es "histórica, emocionante", la preparación de todo el país para tener un "inicio del ciclo lectivo reparador, sostenido y con información". "Es dinámico --aclaró--. Estas recomendaciones son diferentes a las del año pasado, en función de la evidencia científica. Seguramente vamos a tener desafíos y los vamos a encarar como encaramos cada uno de los que tuvimos hasta ahora: evaluando la evidencia científica, dialogando, mirando para adelante". Ratificó "el compromiso para trabajar con consenso, diálogo y federalismo".
Perzcyk: "Presencialidad plena, segura, continua"
A su turno, Perzyc agradeció la presencia y participación de los ministros de todo el país. También agradeció a los trabajadores de la educación por haber sostenido "dos años dificilísimos" y a los de la salud por haber logrado "niveles importantísimos de vacunación", que permiten la "presencialidad plena, segura y continua" en las escuelas. "En ese camino recuperamos la normalidad escolar, que en definitiva es ir construyendo la normalidad de nuestra sociedad", afirmó. Resaltó la importancia de tener un ciclo lectivo "que repare, reconstruya, reencuentre, recupere y marque un nuevo camino
para todos los argentinos y las argentinas".
Por otro lado, destacó el "esfuerzo grande de inversión en educación" para la vuelta a clases, que se traduce, según enumeró, en obras de infraestructura, equipamiento para escuelas técnicas, "millones de libros", computadoras de Conectar Igualdad, capacitación docente y mejoras salariales para los trabajadores. Anunció que la semana que viene se pagarán las primeras 330 mil becas Progresar anunciadas a mitad de diciembre para los chicos del secundario.
Qué establece el nuevo protocolo
Si bien quedan eliminadas las burbujas, ante la presencia de síntomas ---asociados a la Covid o no-- o malestar general el personal y los alumnos no deben acudir a clases. Se recomienda que en tal caso realicen una consulta médica. Si los síntomas no son compatibles con la covid-19, luego de 24 horas pueden volver al establecimiento. Para los casos sospechosos o confirmados se aplican los criterios vigentes para el resto de la sociedad. "La sospecha y la confirmación de casos no implica necesariamente el cierre del aula ni la interrupción de las clases presenciales", dice el documento. El barbijo se recomienda desde el nivel primario en espacios cerrados, tanto para estudiantes como para adultos. El protocolo también hace hincapié en la necesidad de mantener una correcta ventilación cruzada y constante, reforzar las medidas de higiene y desinfección, recordar y promover el lavado de manos y mantener distancia social en aquellos sectores donde no se utilice el barbijo.
Pablo Moreno, presidente de la Sociedad Argentina de Pediatría, destacó, en diálogo con este diario, que el protocolo contemplara las vacunas del calendario nacional. "El país, al igual que otros del mundo, tiene una caída en las tasas de cobertura de las vacunas de calendario, que oscila entre el 10 y el 12 por ciento, lo que abre la puerta a enfermedades que no existen ahora: el sarampión, la rubéola, la meningitis. Las campañas (de vacunación) no están diseñadas. Hay un compromiso para trabajar en conjunto", explicó.