La tarifa del agua potable y servicio cloacal llegará en la próxima factura con un aumento del 30 por ciento en marzo, y luego habrá otro retoque del 20% en setiembre, y otro del 10% en noviembre. Tal es la actualización de tarifa que el Ejecutivo provincial aceptó aplicar, a pedido de Aguas Santafesinas SA, y redondearía al final del año una actualización total del 68%. 

La empresa estatal había elevado el pedido de aumento en las audiencias del mes de enero, al 60% de incremento pero en dos tramos (40 y 20). El Ministerio de Infraestructura, Servicios Públicos y Hábitat , según la Resolución N° 104/22, dispuso que sea en tres, con la facturación de los bimestres 2, 5 y 6. La tarifa de este servicio estaba congelada desde 2020.

"La estructura de costos de la empresa sufrió grandes variaciones, y esos cambios hacen necesario que llevemos adelante esta discusión para, al menos, cubrir los gastos corrientes", había argumentado el titular de Assa, Hugo Morzán. El fundamento apunta al hecho de que buena parte de los insumos que la prestataria del servicio necesita para potabilizar el agua están dolarizados. 

Desde la cartera que conduce Silvina Frana se explicó que la actualización se dispuso en tres etapas, "para disminuir el impacto en el bolsillo de los santafesinos y atender la realidad socioeconómica actual".

La resolución autoriza la adecuación de los precios y valores tarifarios aplicando un ajuste del factor denominado “k”, según lo estipulado en el régimen tarifario, y manteniendo asimismo el sistema de subsidios vigente.

En rigor, el servicio sanitario está subsidiado, remarcó la comunicación ministerial en el anuncio del aumento. "Eso favorece a los usuarios necesitados de ayuda estatal en tanto se ha diagramado según rangos o categorías de usuarios elaboradas de acuerdo a pautas igualitarias de consumo, de manera de no afectar con incrementos tarifarios a los sectores que no pueden afrontarlo”, se aclaró.

La resolución reconoce además que “los incrementos de costo producto de la inflación acumulada y las modificaciones en el tipo de cambio repercuten negativamente en el servicio público”.

Se destacó también cuál ha sido la evolución en materia de obras e inversiones del servicio en los distintos distritos durante 2020/21 así como los costos derivados de la atención de la bajante extraordinaria del río Paraná.

Por lo demás, el Ente Regulador de los Servicios Sanitarios (Enress) renovó el pedido a Assa de continuar con la instalación de caudalímetros (medidores de agua) en las conexiones domiciliarias, con el fin de avanzar con el plan de micromedición para optimización del consumo. Asimismo, se recalcó la misión de continuar con las campañas de difusión masiva sobre el valor del agua como recurso escaso y demás actividades de concientización.

De esta manera, Assa actualiza sus tarifas como ya la Empresa Provincial de la Energía hizo lo propio: 15% de incremento a partir de febrero, y 10% más desde abril, y con aumento de hasta 35% para casos de mayor consumo eléctrico.