El canciller alemán Olaf Scholz tiene previsto viajar este lunes a Ucrania y Rusia para dialogar con los presidentes de ambos países, en medio de las altas tensiones entre Occidente y Moscú y los rumores de una guerra incipiente. En paralelo el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, habló el domingo con su par ucraniano Volodimir Zelenski y acordaron en insistir con la "diplomacia y la disuasión". Mientras tanto, distintas aerolíneas cancelan o desvían sus vuelos con destino a Kiev.
Scholz calificó al conflicto entre Rusia y Ucrania como una situación "crítica y muy peligrosa", y reiteró que Alemania, la Unión Europea (UE) y la OTAN impondrán "duras" sanciones a Rusia de aplicación inmediata en caso de que se cumplan las predicciones de Occidente de que Moscú invadirá a Ucrania. El canciller que sucedió a Angela Merkel se reunirá este lunes en la capital ucraniana con el presidente Zelenski, y un día después será recibido por Putin en Moscú.
La aerolínea de Países Bajos KLM canceló todos los vuelos hacia Ucrania hasta nuevo aviso. Además, la compañía de vuelos chárter ucraniana SkyUp dijo que un vuelo procedente de Madeira, Portugal, con destino a Kiev fue desviado este domingo a la capital de Moldavia, Chisinau. La empresa dijo en un comunicado que la decisión se tomó luego de que la empresa irlandesa que les alquiló el avión dijera que prohibió los vuelos al espacio aéreo ucraniano.
El ministerio de Infraestructura de Ucrania dijo en un comunicado que su espacio aéreo "permanece abierto y el Estado está trabajando para prevenir los riesgos para las compañías aéreas".
El presidente Volodimir Zelenski invitó este domingo a su par estadounidense, Joe Biden, a visitar Kiev en los próximos días. "Estoy convencido de que su llegada será una señal poderosa y contribuirá a la desescalada", le dijo Zelenski a Biden en una conversación telefónica de casi una hora entre ambos.
De acuerdo con la presidencia ucraniana, los dos presidentes abordaron la situación de seguridad en torno a Ucrania ante el despliegue de más de 100 mil soldados rusos en la frontera del país e intercambiaron información sobre la amenaza rusa. "Frenemos cualquier escalada en torno a Ucrania", le dijo Zelenski a Biden, a quien le aseguró que la capital y otras ciudades, como Járkov y Lviv, Dnipro y Odessa están seguras y bajo protección.
Estados Unidos acusa a Rusia de prepararse para invadir a su vecina exrepública soviética, con cuyo gobierno nacionalista y prooccidental está fuertemente enfrentada. Rusia, por su parte, niega tener planes de invadir a Ucrania, pero aprovechó la crisis para exigir a Estados Unidos garantías de que Ucrania no ingresará a la OTAN, algo que ve como una amenaza, y que la alianza reducirá sus tropas en países de Europa del Este. Washington y la alianza atlántica rechazaron esa exigencia.