Los incendios rurales en Corrientes elevaron la superficie afectada a 519 mil hectáreas, casi el doble del área incendiada hasta hace cinco días. Mientras tanto, el gobierno provincial sigue sin brindar datos precisos sobre la tragedia y los organismos nacionales siguen incrementando su presencia en la zona.
La Dirección de Defensa Civil informó que en la zona norte de la provincia se evacuaron viviendas y un hotel de manera preventiva ante el avance del fuego.
"La zona más complicada sigue siendo Ituzaingó", ubicada a 250 kilómetros al norte de la capital correntina, dijo el jefe de Operaciones de esa agencia, Orlando Bertoni.
Cuáles son las zonas más afectadas
Bertoni confirmó que un hotel de la cadena internacional Howard Johnson, ubicado a la vera del río Paraná, "se evacuó por la amenaza de las llamas y especialmente por el humo", al igual que viviendas de la zona.
"Sofocamos un incendio y se prenden otros", lamentó en diálogo con Télam y agregó que el fuego en esta zona afectó especialmente producciones forestales, además de campos y esteros.
"En San Miguel y Loreto, los incendios fueron controlados y continuamos trabajando con focos en Ituzaingó y ahora en Riachuelo", detalló Bertoni.
Más de 20 mil hectáreas por día
El último informe del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), respecto de las áreas quemadas, señala que ascienden a 519 mil hectáreas y que la superficie afectada se incrementó seis veces en comparación con el último registro de enero.
"La evidencia satelital indica que hay un incremento continuo de la superficie total afectada por las quemas desde el inicio del año 2022, a razón de un promedio de casi 20 mil hectáreas por día", señala el estudio.
El informe realizado por los técnicos del INTA Griselda Sauceda, Ruth Perucca y Ditmar Kurtz remarcó que la situación es generada por las "escasas precipitaciones en los últimos dos años y las elevadas temperaturas" afecta a producciones forestales, pastizales, malezales, esteros y bañados.
En las acciones para sofocar el fuego intervienen aviones hidrantes enviados por el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible de la Nación y otros contratados por el Gobierno provincial.
También brigadistas del Servicio Nacional del Manejo del Fuego (SNMF), bomberos de la provincia, bomberos voluntarios y efectivos de fuerzas provinciales y federales, informaron fuentes oficiales.
