El Gobierno de Bélgica llevará adelante una reforma laboral que tiene como uno de sus puntos centrales la reducción a cuatro días de la semana de trabajo, aunque sin una disminución en la carga horaria ni del salario. El anuncio fue hecho por el primer ministro, Alexander de Croo, y los tres vice primeros ministros este martes.
El objetivo, aseguraron desde la coalición gobernante, es que las personas logren una mejor conciliación de la vida laboral y familiar y que la tasa de empleo para personas que tienen entre 20 y 64 años suba del 71,4 por ciento que estaba en el tercer trimestre de 2021 hasta el 80 por ciento en 2030.
La reforma establece que, además de la reducción a cuatro días laborales, el propio trabajador podrá solicitar trabajar menos horas durante una semana y compensarlo la siguiente.
En ambos casos es el trabajador quien tiene la posibilidad de pedir estas modalidades horarias a su empleador. “El empleador deberá justificar la negativa”, señaló Pierre-Yves Dermagne, uno de los tres vice primeros ministros del Ejecutivo belga, ministro de Economía y Trabajo y miembro del Partido Socialista. Si finalmente hay un acuerdo entre ambas partes, este tendrá una vigencia de seis meses.
El plan del Gobierno belga también apunta a discutir las condiciones laborales de los trabajadores de las plataformas para determinar si hay o no una relación de dependencia con la empresa.
“Por primera vez en nuestro país, vamos a presentar criterios claros para complementar la ley sobre la naturaleza de las relaciones laborales. Para poder determinar fácilmente si un trabajador de plataforma lo hace por cuenta ajena o es autónomo”, sostuvo Dermagne.
Hace un par de meses, la Comisión Europea presentó una propuesta que plantea presuponer que los trabajadores de este sector son asalariados, correspondiendo a las empresas demostrar lo contrario, lo que supondría la regularización de más de cuatro millones de falsos autónomos en toda la Unión Europea.
La coalición de Gobierno también se ha comprometido a que la reforma laboral incluya un derecho a la desconexión digital de los trabajadores y fortalecer la capacitación laboral.