El titular del Plan Belgrano, José Cano, fue imputado por estar presuntamente vinculado a un negociado con pedido de coimas que dos funcionarios tucumanos del PAMI y un empresario iniciaron con compañías surcoreanas. Según la denuncia, esas tres personas firmaron en nombre del Estado argentino convenios de compra de productos para la obra social de jubilados y pensionados por alrededor de 300 millones de dólares, destinados al Plan Belgrano. El funcionario negó su participación en el hecho y aseguró desconocer a los involucrados.
La medida contra el funcionario al que el presidente Mauricio Macri le confió el manejo del plan de desarrollo del norte argentino fue dispuesta por la fiscal federal Alejandra Mángano, quien investiga si Alberto Darnay, quien es en el PAMI el coordinador de Enlace con el Plan Belgrano; Osvaldo Barreñada, dirigente del radicalismo tucumano; y el empresario Octavio Accardi firmaron convenios en Corea del Sur a nombre del Estado argentino. Según la denuncia, la compra estipulaba un plus del 10 por ciento que sería destinado en concepto de coima a Cano.
Al ser consultado sobre su imputación, Cano aseguró que no tiene “nada que ver” con esos hechos. “Que la Justicia investigue y finalmente se pondrá blanco sobre negro", afirmó durante una entrevista con radio La Red.
La investigación había sido iniciada por el fiscal Guillermo Marijuán, quien presentó una denuncia por los presuntos delitos de defraudación contra la administración pública y negociaciones incompatibles con la función pública. Por entonces, al frente del PAMI se encontraba Carlos Regazzoni y su administración inició un sumario interno contra Darnay para investigar los hechos.
Luego de ser presentada la denuncia, el caso fue sorteado y recayó en el juez federal Sergio Torres, quien puso la investigación en las manos de Mángano. La fiscal imputó a Cano, los otros tres sospechosos y Dae Kyu Yang y Young Sik Oh, dos ciudadanos coreanos que habrían participado de la maniobra.
Lo que se trata de determinar es si efectivamente el trío de sospechosos viajó a Corea del Sur y tuvo allí reuniones con diferentes compañías para concretar una transacción por aparatología para la obra social de los jubilados y pensionados. Lo que hasta ahora se acreditó es que en octubre del año pasado viajaron a Europa conformados en una sociedad denominada Kumho Latam. La presunción es que desde allí partieron a Seúl.
Cano aseguró que "no hubo ningún viaje oficial del Gobierno a Corea de Sur el año pasado" y dijo que tampoco hay una denuncia de la embajada de ese país a la Cancillería argentina ni al Plan Belgrano. “Estoy muy tranquilo”, agregó.
En su descargo ante la Justicia, Cano había negado la operación, así como también cualquier vínculo de los involucrados con el Plan Belgrano. “Hay tres personas que ni las conozco y que desconozco su actividad", sostuvo. Agregó que Barreñeda “nunca tuvo vinculación como funcionario en mi área” y reconoció que Darnay trabaja en el PAMI y que “coordina la acción” de ese organismo “en diez provincias del Plan Belgrano”. Pero dijo que no lo conoce.