El costo de la Canasta Básica Alimentaria (CBA) que establece la línea de indigencia creció 4,2 por ciento mensual en enero, el registro más alto desde marzo de 2021, según informó el Indec. En tanto, la Canasta Básica Total (CBT), que determina la línea de pobreza, subió 3,3 por ciento, su mayor avance desde abril del año pasado. Son valores que muy probablemente tengan una repercusión negativa sobre los índices de pobreza e indigencia, en la medida en que los ingresos no alcancen a compensar las subas de precios.
La CBA está compuesta por alimentos que le permiten a un varón adulto de entre 30 y 60 años durante un mes necesidades kilocalóricas y proteicas imprescindibles. El valor de esa canasta pasó de 10.667 pesos a 11.111 pesos entre diciembre y enero, lo cual implicó un aumento del 4,2 por ciento. Asimismo, una familia compuesta por dos adultos y dos niños necesitó en el primer mes del año 34.334 pesos para no ser considerada indigente.
Una familia de igual composición necesitó un ingreso mensual de 78.624 pesos para no ser considerada pobre. La CBT, que incluye no solo alimentos sino otros gastos fundamentales, para ese grupo familiar duplica al actual salario mínimo vital y móvil, que en marzo próximo se situará en los 32.616 pesos. La suba mensual de la CBT se ubicó por debajo del alza de la inflación del mes mientras que la CBA superó al incremento del costo de vida en el mismo período. En los últimos doce meses, la CBA subió un 44,7 por ciento y la CBT lo hizo en un 39,3 por ciento, en ambos casos por debajo de la inflación del período, de 50,7 por ciento.