Sólo faltan 10 días para que inicien los festejos del carnaval en todo el país, pero sin dudas, quienes más lo esperan son las comparsas de la Quebrada de Humahuaca, en la provincia de Jujuy. Sin embargo, el miércoles fjeron notificados las nuevas medidas que impuso el gobernador radical Gerardo Morales para su desarrollo, situación que causó un rotundo rechazo.
Entre las principales disposiciones se estableció que las actividades de las comparsas deben terminar a las 20, cuando usualmente lo hacían a las 24. En ese sentido, entendieron que dichas actuaciones sólo responden a fines netamente recaudatorios, debido a las continuas multas que se les viene aplicando a las agrupaciones, dejando de lado el sentido de comunidad, reciprocidad y solidaridad que tiene la fiesta del carnaval en las localidades de la puna jujeña.
El vicepresidente de la agrupación Los Ahijaditos de Tilcara, Marcos López, dialogó con Salta/12 y contó que el miércoles personal de la Policía de Jujuy, convocó a las comparsas de la Quebrada para anunciarles las nuevas medidas dispuestas por el Ejecutivo provincial. "Principalmente se limita salir hasta las 20" dijo López, quien aseguró que dicho horario resulta un gran impedimento para realizar sus actuaciones.
Tras saber de esa imposición "empezamos a decirles a los funcionarios policiales que no lo podíamos respetar", pero la respuesta de los uniformados sólo fue que venían a cumplir con la tarea de informar. La medida provocó un gran revuelo entre las comparsas, y algunas de ellas, aglutinadas en la Unión de Comparsas Tilcareñas, anunciaron una marcha para hoy que partirá a las 8 desde la recoba municipal del pueblo de Tilcara, para luego trasladarse al ingreso del mismo.
Debido al rechazo recibido desde el Ministerio de Seguridad de Jujuy, a cargo de Luis Martin, citaron a las agrupaciones para hoy al mediodía con el fin de aclarar lo comunicado. En dicho encuentro también estará presente el intendente de Tilcara, Ricardo Romero. Según la cédula de notificación que recibieron las comparsas, tendrán que cumplir una serie de "extensos" requisitos para distintas acciones.
Por un lado, tendrán que cumplimentar lo pedido para solicitar un Reba Eventual (Registro de Expendedores de Bebidas Alcohólicas). Por otro lado, deberán tener la autorización de las comisarías locales en caso de no ser locales inscriptos en el Relbah, el registro que habilita el espacio físico y resulta una nueva norma para las agrupaciones. En caso de estar registradas, tendrán que tener otra autorización con nuevos requisitos.
Luego están las condiciones que deberán cumplimentar para el desarrollo de los eventos masivos al aire libre. Además de pautar el horario de las 20, también se indicó que cada comparsa deberá especificar el día, el horario, la cantidad de posibles concurrentes así como el recorrido que realizarán en sus actividades.
Esta situación resulta para las agrupaciones imposible de controlar, debido a la gran cantidad de personas que asisten a la localidades jujeñas y que se suman directamente al recorrido de las comparsas. Además, López relató que se suele "salir a las calles a las 16 o 17, no porque queramos fijar ese horario, sino porque la misma gente recién sale a esa hora".
Para las comparsas lo comunicado por el gobierno jujeño resultaron ser "cosas descabelladas", ya que sólo se apunta a burocratizar la festividad cuando "nada de eso tiene que ver con nuestra realidad", e indicaron que la gran mayoría de las medidas se tomaron de leyes que se aplican en grandes ciudades y no en pueblos. "Son medidas citadinas, cuando nuestras vivencias y cosmovisión tienen que ver con la reciprocidad, la comunidad y la solidaridad", manifestó López.
De no cumplirse con lo comunicado, el gobierno de Morales aplicará multas, lo que no resulta extraño para las agrupaciones puesto que sólo perciben un fin lucrativo de parte del gobierno a costa de ellos. "¿De dónde vamos a sacar plata?" se preguntó el vicepresidente de Los Ahijaditos, quien también informó que dichas medidas ya habían querido aplicarse en 2020 y que se suman a otras que también deben cumplir.
Para que una comparsa se haga presente en el carnaval, al menos debe tener un millón de pesos, según comunicaron. Y al tratarse de pequeñas agrupaciones, suelen desarrollar distintas acciones, como bailes, para llegar a la recaudación necesaria. Aún así, López reconoció que "los han matado con los impuestos".
"Morales vende un discurso ligado a la Pachamama donde promociona los carnavales, pero a nosotros nos ahoga con los impuestos", denunció el comparsero, indicando que lo único que el gobernador les dio fueron "palos en la rueda". "Todo se siente como una falta de respecto hacia nosotros y una total ignorancia de cómo nos movemos en la Quebrada", precisó la autoridad.
En ese sentido, la preocupación también está puesta en que dichas multas son insólitas, llegando algunas a alcanzar el millón de pesos. "No podemos pagarlas, no somos empresas y no tenemos esa plata porque apenas tenemos para cubrir la salida de cada año", dijo López, quien contó que su comparsa tiene una multa de 50 mil aún sin poder abonar.
En Tilcara existen alrededor de 15 comparsas, pero también están las agrupaciones de Maimará, Purmamarca y Humahuaca, sólo por nombrar los principales epicentros del carnaval jujeño.
La doble vara en el carnaval
El cuestionamiento de la mayoría de las comparsas radica en que sólo reciben multas, mientras que el gobierno de Morales contribuye económicamente a festivales que "no tienen nada que ver con la cultura carnavalesca", como ser el caso del Festival de Los Tekis que se desarrolla en San Salvador de Jujuy.
Si bien López dijo que no estaba en contra de su realización, claramente percibe que lo impulsado por la banda jujeña sólo responde a festivales lucrativos de un sector privado, cuando las agrupaciones intentan reivindicar valores comunitarios. "El Gobierno vende la cultura del carnaval, pero a nosotros no nos ayuda con nada", reprochó, asegurando que a Los Tekis se les da lugar, eximisión de impuestos y toda la infraestructura que requieran.
En ese sentido, el periodista tilcareño Camilo Harogal, indicó a Salta/12 que con el festival de Los Tekis, se puede ver la contracara y la posición real que tiene el Ejecutivo provincial con respecto al carnaval. "Existe una implicancia por el inmenso auspicio estatal" al evento de los músicos, cuando a las comparsas "se les pone cada vez más complicaciones para que lleven adelante sus actividades", indicó.
Para el periodista existe una clara intención de Morales de trasladar la festividad del carnaval a la capital jujeña, pues informó que esta problemática no es algo nuevo en Jujuy. "Se viene profundizando con la pandemia y se suma que la mayoría de las comparsas de Tilcara están endeudadísimas por las multas y los altos cosas impositivos", relató.
Afirmó que el detonante fue precisamente la restricción horaria, pero se suman distintas medidas que "ya vienen molestando y creando un clima fuerte" entre las comparsas y el gobierno jujeño.
En ese escenario, Harogal también contó que existe una diferenciación entre las propias agrupaciones, debido a que algunas están apadrinadas por el vicegobernador Carlos Haquim y se enteró de que algunas de estas comparsas fueron eximidas de las multas que se les habían notificado.
"Se nota una doble vara" de parte del gobierno jujeño. En ese sentido, indicó que la presencia de cualquier comparsa, significa una "presencia política importante en el territorio". Algo similar a lo que suele ocurrir con los presidente de los centros vecinales en cualquier barrio "Los presidentes de las agrupaciones son referentes políticos en la localidad", agregó.