El gerente del Hospital Materno Infantil, Federico Mangione, descartó ayer que la niña wichí que falleció la madrugada del jueves último haya contraído flurona, ya que de los análisis realizados surgió que había contraído gripe A y que había dos muestras negativas de PCR para covid-19.
Sin embargo, en declaraciones públicas, el ministro de Salud de Salta, Juan José Esteban, informó que se analizan las muertes de otros siete niños que presentaron los mismos síntomas de la nena que falleció. Todo bajo la sospecha que pueda ser flurona.
“Desmiento que sea flurona”, insistió Mangione ante Salta/12 al sostener que “no es fácil dar un pronóstico de un día para el otro menos en General Mosconi o Tartagal”, ambos municipios del departamento San Martín en el norte salteño.
Pero ayer la información oficial del Ministerio de Salud Pública de Salta insistía en que el deceso de la nena se dio por la complicación que surgió tras contraer la flurona, una combinación de la gripe a con el Sars-Cov-2 que produce la Covid 19.
El gerente aclaró que el ingreso de la nena al Hospital fue el miércoles a la noche cuando llegó trasladada desde el norte en un vuelo sanitario, con una infección generalizada, bajo peso y estado crítico a raíz de una neumonía pulmonar izquierda. “Al ingresar tuvo una falla multiorgánica y esto fue lo que conllevó al deceso”, afirmó.
Mangione añadió que ese mismo día (y no el posterior como se había informado), ingresó su hermana más pequeña de 8 meses, que si bien no tiene neumonía, si dio positivo para gripe. Hasta ayer esta bebé se encontraba estable.
Con respecto a los siete niños que podrían haber muerto por flurona, Mangione recordó que durante el operativo que realizaron a fines de enero pasado, derivaron a unos 6 niños y niñas de las comunidades de Santa Victoria Este (SVE, en el departamento Rivadavia) con patologías similares a la niña fallecida este jueves. Cuatro de estos chicos y chicas dieron positivo para la covid-19 y dos para gripe B. Todos lograron recuperarse con la atención inmediata del equipo de salud. El funcionario reconoció que las niñas y niños con comorbilidades suelen tener complicaciones en su situación de salud que pueden ser fatales ante los cuadros que presenta.
Al igual que el ministro Esteban, Mangione dijo que en las comunidades hay resistencia a la vacuna contra la covid-19 y “tenemos que intentar convencer a la gente que se vacune”. Añadió que también es “difícil hisoparlos” para hacer los testeos. Varias personas referentes de las comunidades originarias sostienen que no se resisten a la vacunación, sino que consideran que les falta información.
Esteban, por su parte, sostuvo que estas dos hermanitas, la fallecida y la que sigue internada, tenían “incompleto el esquema de vacunación de Calendario Nacional”. Ante el deceso, desde el Ministerio de Salud se informó que “el equipo de Epidemiología de la provincia está trabajando en terreno con la investigación epidemiológica pertinente, en misiones (comunidades indígenas) y parajes de la zona”.
La capacitación intercultural
La resistencia a las vacunas en las comunidades es una situación ya planteada pero no resuelta. “Sigue igual o peor el abordaje intercultural” de la salud, entendió por su parte Seila Pérez, integrante del Pueblo Simba Guaraní de Salta y de la Secretaría Nacional de Pueblos Originarios de la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos (APDH). Una vez más se apuntó a la falta de capacitación en el equipo de Salud Pública sobre la interculturalidad.
Según pudo conocer Salta/12, los casos en que sí hubo, o hay, una actuación respetuosa de la cosmovisión indígena son consecuencia más bien de un interés particular de los profesionales de la salud que de una política de Estado.
Para Pérez, la capacitación intercultural implica “un trabajo o un compromiso de conocer el sistema tradicional ancestral y la relación con la espiritualidad. Cuando hablamos de sistema de salud ancestral o cultural hablamos de las parteras, asi como las pautas para curarnos y sanarnos las enfermedades, la promoción de la salud”.
En la Corte de Justicia salteña aún hay dos amparos que reclaman dar cumplimiento a lo establecido en la Ley Provincial N° 7856 de Salud Intercultural. Ambos amparos, acompañados por medidas cautelares en pos de dar una respuesta urgente a esta situación, fueron apelados por el gobierno provincial. En opinión de Pérez, si bien esta normativa es necesaria, se debe entender que su aplicación “no garantiza la salud pública Intercultural”. En este punto la referente indígena sostuvo que es necesario que quienes capaciten a los profesionales del equipo sanitario “sean los mismos referentes de los Pueblos Originarios”, incluso con un presupuesto para reconocer esa tarea.
Al detallar la complejidad de la interculturalidad puso de ejemplo que “en el departamento San Martín son 10 pueblos originarios y 15 las lenguas que se hablan”.
Añadió la necesidad de que el sistema biomédico hegemónico reconozca que “nuestra medicina no es alternativa, es ancestral y la venimos aplicando de hace años”, al tiempo que recordó que tanto la Organización Mundial de la Salud como la Organización Panamericana de la Salud (OMS y OPS) reconocen estos conocimientos de los pueblos originarios.