La ultraderecha española desembarcó este fin de semana en Bogotá. Con el telón de fondo de la elección presidencial de mayo en Colombia y ante la posibilidad latente de un triunfo de Gustavo Petro, la versión regional del "Foro Madrid", impulsado por Vox, convocó a "líderes políticos y sociales de toda la región para hacer frente a las amenazas de los aliados de los regímenes de Cuba, Venezuela, Nicaragua y el narcocomunismo".
Por el lujoso hotel Radisson, ubicado en el centro de negocios de la capital colombiana, desfilaron personajes como Francisco Tudela, exvicepresidente de Perú durante el régimen de Alberto Fujimori; Ernesto Araújo, exministro de Relaciones Exteriores del gobierno de Jair Bolsonaro en Brasil y negacionista del cambio climático y el coronavirus; Carlos Sánchez Berzaín, exministro de la Presidencia, Gobierno y Defensa de Bolivia durante el oscuro gobierno de Gonzalo Sánchez de Lozada; y Álvaro Uribe, expresidente de Colombia. El diputado ultraliberal Javier Milei no pudo ser de la partida por "cambios de horario" imprevistos.
La convocatoria de este foro coincide con los buenos resultados obtenidos por Vox en Castilla y León, donde pasó de 1 a 13 escaños. "La ultraderecha busca construir un relato con arraigo y sustento internacional. Busca élites que compartan sus postulados anticomunistas, anti-diversidad o en contra de la igualdad de género. Aunque tiene una base natalista, encuentra en América latina eco entre los sectores ultraconservadores o las elites que temen el ascenso al poder de grupos hasta ahora subrepresentados como indígenas o minorías", señaló a Página/12 Erika Rodríguez Pinzón, doctora en relaciones internacionales e investigadora asociada del Instituto Complutense de Estudios Internacionales.
Las principales espadas de la ultraderecha regional
Abascal, en calidad de presidente de la Fundación Disenso, think tank de Vox, dio la bienvenida al cónclave con un mensaje grabado en el que señaló que "la situación que atraviesan las naciones que conforman la Iberosfera es enormemente preocupante". El líder de Vox agregó que "nuestros países y sociedades se enfrentan a un ataque frontal del Foro de San Pablo y del Grupo de Puebla, que a través de sus organizaciones, partidos y candidatos títeres quieren subvertir nuestras democracias encaminándolas a proyectos totalitarios".
Precisamente el Grupo de Puebla había salido a cuestionar la alianza entre el expresidente de Colombia, Andrés Pastrana, y Vox. El organismo que reúne a partidos y gobiernos progresistas de América latina se preguntó: "¿Tan preocupados están con el posible triunfo del progresismo y el avance de Petro como para designar un vocero tan desprestigiado en Colombia por sus propuestas fascistas?". Pastrana apoya la candidatura del senador David Barguil, del Partido Conservador, y plantea los comicios colombianos como un momento clave para la región por el equilibrio de fuerzas entre la derecha y la izquierda.
Otro de los asistentes al encuentro del fin de semana fue el exvicepresidente peruano Francisco Tudela, quien ocupó el cargo durante la tercera presidencia de Alberto Fujimori, y aseguró que se vive "una nueva guerra fría global cuya manifestación iberoamericana es el Foro de San Pablo, que representa un riesgo gigantesco para la sociedad". Tudela es recordado por ser uno de los impulsores de la Ley de Amnistía General, que excarceló a todo el personal militar y policial condenado por secuestros y crímenes contra agrupaciones de izquierda desde 1980.
Por su parte Ernesto Araújo, el ministro más negacionista de Bolsonaro, envió un mensaje grabado al igual que diputado e hijo del presidente de Brasil, Eduardo Bolsonaro. Araújo, quien como canciller se alineó con el gobierno del expresidente estadounidense Donald Trump e intentó distanciarse de China, el mayor socio comercial de Brasil, dijo que Bolsonaro, con su reciente viaje a Rusia, da a entender que "está tranquilo" con el "proyecto euroasiático ruso-chino", al que tachó de "antidemocrático".
"Bogotá será la tumba del fascismo"
Medio centenar de manifestantes que responden a la organización RASH Bogotá y a la Coordinadora Antifascista se habían congregado el viernes frente al hotel donde se reunieron los exponentes de la extrema derecha iberoamericana, al grito de "No pasarán" y "Bogotá será la tumba del fascismo". Aunque la concentración se inició de forma pacífica, los manifestantes lanzaron piedras y pintura contra el edificio. Las fuerzas de seguridad, que contaron con el apoyo del Escuadrón Móvil Antidisturbios (Esmad), reprimieron la manifestación y dejaron un saldo de al menos cuatro detenidos.
Para Felipe Pineda Ruiz, investigador y director de la organización Somos Ciudadanos, hay que tener en cuenta el "enrarecido contexto" en que se desarrolló este congreso: "La violencia paramilitar y guerrillera aupada por el gobierno en la frontera con Venezuela y en el Pacífico colombiano, zona por donde sale el 70 por ciento de la droga que el país exporta; y un paro nacional convocado diez días antes de las elecciones al Congreso, en donde seguramente ocurrirán los saboteos estatales históricos para crear un clima de zozobra y miedo del que el gobierno intentará sacará provecho para vender el discurso antiterrorista".
Pineda Ruiz sostuvo que si ese discurso "se generaliza como sucedió durante el paro nacional de 2020, la desprestigiada derecha colombiana tendrá la bocanada de oxígeno que le hace falta para surgir de las cenizas". Pinzón, en tanto, cree que "en Colombia la derecha radical de Uribe está muy desgastada, por lo que "este evento puede tener efecto más en la movilización de la izquierda que refuerza sus argumentos que en una derecha que tocó su techo electoral".
Otros movimientos de Vox en la región
No es la primera vez que Vox se acerca a la región. Ya lo hizo en México, donde intentó registrar su marca en el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial para poder ofrecer varios servicios, entre ellos consultorías en el ámbito de la seguridad nacional. Además parlamentarios de Vox estuvieron en la toma de posesión del presidente de Ecuador, Guillermo Lasso, y tuvieron encuentros en Lima con la excandidata presidencial de Perú, Keiko Fujimori. Incluso se movieron cerca de la expresidenta de facto de Bolivia, Jeanine Áñez, a quien Abascal propuso como candidata al Premio Sájarov del Parlamento Europeo.
"El Foro Madrid se desarrolló en un marco de victorias de partidos y movimientos progresistas ininterrumpido entre 2020 y 2022", planteó Pineda Ruiz, considerando la preocupación de los sectores conservadores ante una eventual llegada al poder de Lula en Brasil y Petro en Colombia. El director de Somos Ciudadanos cree que el objetivo principal de Vox es "cabalgar sobre el declive de las derechas en el continente y asumir su liderazgo".