El presidente de Rusia, Vladimir Putin, aseguró que "la crisis de Ucrania está relacionada con nuestros intereses de seguridad" durante una reunión extraordinaria del Consejo de Seguridad del país para abordar el conflicto con el Gobierno de Volodímir Zelenski. Por su parte, los líderes de las repúblicas autoproclamadas de Donetsk y Lugansk, Denís Pushilin y Leonid Pásechnik, pidieron a Putin que reconozca la independencia de ambos territorios y activar una "cooperación en materia de defensa".
La advertencia de Putin
El mandatario ruso afirmó que uno de los objetivos de la reunión es determinar qué hacer con las solicitudes de Donetsk y Lugansk y explicó que el reconocimiento de ambos territorios como repúblicas está estrechamente relacionada con los problemas de garantía de seguridad en Europa y el mundo.
Asimismo, Putin aseguró que "nadie discute" que en Ucrania hubo un golpe de Estado en 2014 que no fue reconocido por algunas regiones del país, lo que dio origen a las autoproclamadas repúblicas de Donetsk y Lugansk.
El presidente ruso sostuvo que su país colaboró en todo lo posible para solucionar el conflicto de forma pacífica mientras "Kiev ha estado maltratando a la gente que vive allí a lo largo de todos estos años" y el Gobierno "no tiene intención de implementar los acuerdos de Minsk".
Sube la tensión
Más temprano, el ejército ruso informó que abatió a cinco “saboteadores” que entraron en su territorio desde Ucrania y que un proyectil que había sido disparado desde territorio ucraniano destruyó un puesto fronterizo.
"En los combates, fueron abatidos cinco personas que pertenecían a un grupo de saboteadores que violaron la frontera de Rusia", indicaron los militares rusos en un comunicado en el que precisaron que el incidente se produjo cerca de la localidad de Mityakinskaya en la región de Rostov a las 06H00 (03H00 GMT).
Según la agencia de noticias rusa RT, dos vehículos de combate de infantería ucranianos fueron a buscar a los saboteadores que pasaron la frontera rusa y fueron destruidos.
Horas antes, un obús disparado desde territorio ucraniano destruyó una estructura de un puesto fronterizo ruso sin dejar víctimas, acusaron los servicios de seguridad rusos, en un contexto de combates entre fuerzas de Kiev y separatistas prorrusos en el este de la exrepública soviética. El Ejército ucraniano negó haber disparado.
Los países occidentales y Ucrania denuncian hace semanas que Rusia desplegó a 150 mil soldados cerca de la frontera y pronostican una invasión rusa que todavía no sucede.
